España concluye el Mundial de piragüismo con un oro en relevos K-1 200

La selección española de piragüismo ha finalizado este domingo su participación en los Campeonatos del Mundo 2009 con un oro en la novedosa prueba de relevos de K-1 200, metal que se suma a los otros tres obtenidos en la cita canadiense. La competición, disputada en el idílico lago Banook, en Canadá, un campo de regatas que en invierno queda cubierto por el hielo, ha concluido con cuatro puestos de podio para el equipo español.

Al oro del relevo K-1 200, formado por el catalán Saúl Craviotto, el asturiano Fran Llera, el vasco Ekaitz Saies y el gallego Carlos Pérez Rial, se suman el título mundial en K-2 1.000 del zamorano Emilio Merchán y el palentino Diego Cosgaya; la medalla de plata de los vigentes campeones olímpicos de K-2 500 Craviotto y Pérez Rial en K-2 200 y el tercer lugar del K-5 500 femenino, integrado por la andaluza Beatriz Manchón, la asturiana Jana Smidakova y las gallegas Sonia Molanes y Teresa Portela.

Antes del relevo, prueba que ha clausurado los Mundiales, Saúl Craviotto y Carlos Pérez Rial se proclamaron subcameones del mundo de K-2 200, la que será nueva distancia olímpica en Londres. Con un tiempo de 32 segundos y 231 milésimas, se han quedado a dos milésimas del título mundial, que fue para el equipo de Bielorrusia. Las cuatro embarcaciones españolas restantes en la distancia del medio kilómetro se han clasificado en quinto lugar, en el caso del K-2 de Beatriz Manchón y Jana Smidakova, y en el noveno (Fran Llera y Teresa Portela, en K-1, y David Cal, en C-1).

Craviotto y Pérez Rial quedaron excluidos de un podio en el que una llegada muy igualada les hizo aparecer como medalla de bronce durante algunos instantes. Una magnífica salida y el liderazgo con una ventaja de casi un barco sobre sus rivales pronosticaba una clara victoria de los españoles, que se habían mostrado intratables en eliminatorias y semifinales, pero no han podido aguantar el ritmo en los últimos 100 metros.