La confianza del consumidor pierde 13,2 puntos en un año y sufre un mínimo histórico
El índice encadena ya ocho meses consecutivos a la baja
La confianza de los consumidores españoles sigue en caída libre tras bajar en diciembre 3,8 puntos con respecto al mes anterior, debido sobre todo a una peor percepción de la situación actual de la economía, con lo que en el conjunto de 2007 ha caído un total de 13,2 puntos. Gracias a esta nueva bajada, el índice del ICO ha retrocedido hasta el mínimo histórico de su serie tras ocho meses consecutivos de descensos.
Según los datos publicados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) se ha situado en diciembre en 74,9 puntos, frente a los 88,8 puntos con los que cerró 2006, influido sobre todo por el aumento de la incertidumbre financiera en la segunda parte del año.
El indicador sobre la situación actual ha bajado cinco puntos el mes pasado y 20,4 en el conjunto del año, mientras que el de expectativas, que había mejorado en noviembre, ha vuelto a caer en el último mes del año, 2,5 puntos y ha sumado una bajada de 6 puntos en todo 2007.
Tras a dar conocer estos datos, el presidente del ICO, Aurelio Martínez, ha recahzado hacer predicciones sobre el momento en que el indicador frenará su caída y ha incidido en que el ICC-ICO es reflejo del estado de ánimo.
"¿Quién no respondería ahora que la economía española está peor que hace seis meses? El crecimiento se está ralentizando, evidentemente, pero no es un mal dato", ha comentado.
Martínez ha explicado el descenso de la confianza del consumidor por el efecto combinado de tres factores. Se trataría de la peor situación de las economías familiares, al tener que enfrentarse a incrementos en el pago de sus hipotecas por los tipos de interés, además de la "coyuntural" subida de la inflación, "debida en un 60% a la subida de precios en la alimentación y el petróleo".
En todo caso, ha precisado que estos efectos son "claramente estacionales" y que en enero volverá a desestacionalizarse, apoyado en enero también por el efecto de las rebajas.
El largo debate sobre las turbulencias, que Martínez ha señalado como tercer factor, también ha afectado a la percepción de los consumidores y ha tenido un claro reflejo en el indicador, cayendo desde mayo, pero particularmente desde el mes de agosto, cuando se comenzaron a notar de forma más acusada sus efectos.
