_
_
_
_
_

Berlusconi aprueba la división de Alitalia en dos

El Gobierno italiano cambia la ley de quiebras para aprobar el plan de rescate de la aerolínea

El Consejo de Ministros del Gobierno italiano ha dado hoy luz verde al plan Fenice, con el que el banco Intesa San Paolo, que ha trabajado como consultor, se propone salvar a la compañía de bandera de la quiebra a través de la reforma de la Ley Marzano, que regula los procedimientos de urgencia que se pueden llevar a cabo para reestructurar las grandes empresas en caso de insolvencia.

Ahora, Alitalia "morirá y resucitará en dos días, como en el mito del Fénix", en el que precisamente se habría inspirado el plan (en italiano, fenice significa fénix), según ha destacado hoy el diario Corriere della Sera.

La reforma de la ley permitirá la administración controlada de Alitalia a través de un comisario, que dividerá en dos la compañía, una buena (la llamada nueva Alitalia), -en la que confluirán los slots aviones y activos todavía rentables-; y una mala, que gestionará, entre otras cosas, los cerca de 7.000 despidos previstos. Mañana, le tocará el turno al consejo de administración de la empresa, que declarará su estado de insolvencia y dará paso a la administración controlada.

Más información
Alitalia, al borde de la quiebra

La satisfacción del Gobierno quedó clara ayer, en boca del ministro de Economía, Giulio Tremonti, quien aseguró que el anterior Gobierno de centro-izquierda "había dejado dos desastres: Nápoles y Alitalia. El primero, Berlusconi lo ha resuelto a finales de julio", mientras que el de Alitalia queda solucionado a partir de hoy.

Ahora, el momento más delicado será la negociación con los sindicatos que han asegurado que batallarán hasta el final para defender los puestos de trabajo. Por su parte, el exponente de la oposición, Antonio di Pietro, calificó el plan del Gobierno Berlusconi como una "estafa colosal", que en algunos puntos ha llegado incluso a la "ilegalidad", empezando por las declaraciones que Berlusconi lanzó durante la campaña electoral, en las que aseguraba la existencia de un consorcio empresarial italiano dispuesto a salvar a la compañía, en contra de los planes del anterior Gobierno de centro-izquierda, que ya había empezado a negociar con Air-France-Klm.

Berlusconi apoya ahora un acuerdo con Air France-KLM

Ahora, en cambio, el Gobierno que dirige Berlusconi ve con buenos ojos un posible acuerdo con la compañía franco-holandesa para que se convierta en el socio internacional de los 16 empresarios italianos que se han comprometido a relanzar la aerolínea.

Éstos son Rocco Sabelli, candidato a consejero delegado de la nueva compañía -que se llamará Compañía Aerea Italiana-; y mano derecha del responsable de Piaggio, Roberto Colaninno, que supuestamente presidirá la aerolinea renovada.

Además participarán el Grupo Benetton -a través de Atlantia (antigua Autostrade)-; Aponte; Riva; Fratini -a través de Fingen-; Ligresti -a través de Fonsai-; Equinox; Clessidra; el presidente de Air One, Carlo Toto; Fossati -a través de Findim-; Marcegaglia; Caltagirone Bellavista -a través de Acqua marcia-; Gavio -a través de Argo-; Davide Maccagnani -a través de MACCA-; el presidente de Pirelli, Marco Tronchetti Provera-; e Intesa Sanpaolo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_