La crecida de los ríos ha provocado desalojos y cortes de tráfico en Guipúzcoa y Navarra

El temporal en forma de lluvia dejó durante la pasada madrugada miles de litros de agua en las comunidades de País Vasco y Navarra, provocando el desbordamiento de numerosos ríos y obligando al corte de carreteras. Así, los servicios de emergencia del País Vasco trabajaron durante toda la jornada para vigilar el cauce del río Urumea (Guipúzcoa), que acabó desbordándose y obligando a desviar a los vehículos por la presencia de balsas de agua. Mientras en Pamplona tuvieron que desviar varias rutas del transporte urbano y los bomberos tuvieron que realizar cerca de medio centenar de intervenciones por inundaciones en sotos y edificios cercanos a los cauces de los ríos.

En el País Vasco, uno de los río que más preocupaba era el Urumea, y que ya hizo activar el pasado fin de semana el Plan de Emergencia por Inundaciones del Departamento de Interior del Gobierno vasco. Por ello, los servicios de emergencias trabajaron durante toda la madrugada y el día de hoy para vigilar el cauce y prevenir daños personales y minimizar los materiales. El Departamento dirigido por Javier Balza pidió a la población cercana al río que se mantenga informada que retire los vehículos estacionados junto al río y que no transite por zonas cercanas al agua. Asimismo, recomienda estar preparado para desalojar bajos y lonjas y no atravesar las balsas de agua con el vehículo.

Cortes de carretera

Además, debido a las intensas lluvias, varias carreteras de la zona permanecieron cortadas durante la mañana, destacando la carretera que va del barrio de Martutene, en San Sebastián, a la localidad de Astigarraga. Según el Consistorio de San Sebastián, debido a este corte, el tráfico en las zonas periféricas de la ciudad fue "muy intenso" y se registraron algunos "problemas". El Ayuntamiento de San Sebastián aseguró también que no fue necesario el realojo de ninguna familia, aunque sí se han inundado algunos garajes. Asimismo, aseguró que han estado "trabajando al cien por cien" en las labores de achique de agua y limpieza de barro y material acumulado en

las zonas inundadas a causa del desbordamiento de los ríos. Por su parte, el desbordamiento del río Endarlatza ha afectado a algunas viviendas aisladas.

Prueba de la intensidad de las precipitaciones es que el Sistema de la Mancomunidad de Aguas de Añarbe, en Guipúzcoa, gestionó en 48 horas precipitaciones "intensísimas" que alcanzaron los 117,2 litros por metro cuadrado, prácticamente "el doble de los 60 litros por metro cuadrado" estimados para 24 horas en el aviso por fenómenos meteorológicos adversos. Además, esta cantidad equivale al "70% de las precipitaciones de un mes de febrero medio completo", según señala la propia Mancomunidad.

Por su parte, los ríos del norte de Navarra y la Comarca de Pamplona registraron caudales muy importantes y obligaron a cortar 12 vías y modificar varias líneas de transporte urbano de la ciudad de Pamplona. Además, los bomberos tuvieron que realizar cerca de medio centenar de intervenciones por inundaciones en sotos y edificios cercanos a los cauces de los ríos.

Mejora la situación

A lo largo de la mañana, el nivel de los ríos que atraviesan el norte de Navarra y la Comarca de Pamplona comenzó a descender y las carreteras cortadas por el desbordamiento de ríos empezaron a abrirse. Así, a media mañana quedó abierta la N-121-A, que estaba cortada en tres puntos por desbordamientos del río Bidasoa. Finalmente, sobre las 11.30, sólo permanecía cortada la NA-30, donde el agua ha superado el metro y medio. La provincia de Huesca también se ha visto afectada por estas intensas lluvias. Y es que ante el riesgo de avalanchas, la Prefectura de los Pirineos Atlánticos cerró la carretera N.134 de acceso del Túnel de Somport, en la vertiente francesa. De esta forma, quedó prohibida la circulación de todo tipo de vehículos hasta nuevo aviso.

Temporal de viento

Al margen de las lluvias, Guipúzcoa se vio ayer afectada por intensas rachas de viento que obligaron a desviar tres vuelos en el aeropuerto de Hondarribia. El aire provocó también la caída de varios árboles en la provincia, lo que obligó al corte de algunos tramos de carretera.

La previsión para hoy es que la intensidad de las precipitaciones vaya disminuyendo a lo largo del día en el Cantábrico. Se mantiene sin embargo la alerta por nieve en el Pirineo navarro, aragonés y catalán, donde además se producirán vientos moderados aunque alcanzarán rachas de hasta 60 kilómetros por hora, según las previsiones de Meteorología (Aemet).

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