El presidente sudanés anuncia el "alto el fuego unilateral" en Darfur
El principal grupo rebelde en la zona desconfía de al Bashir y cree que se debe al proceso judicial que está abierto contra él
El presidente de Sudán, Omar al Bashir, ha anunciado hoy el alto el fuego unilateral en la región de Darfur. Sin embargo, el principal grupo rebelde de la zona ha rechazado sumarse a la iniciativa y ha declarado que desconfía de la promesa del gobernante de cesar las operaciones militares.
El gobernante sudanés ha hecho el anuncio del alto el fuego "inmediato" e "incondicional" en la clausura de una conferencia abierta el mes pasado para impulsar las negociaciones de paz en Darfur, a la que los grupos rebeldes y la oposición sudanesa se han negado a participar ya que la consideraban una "pérdida de tiempo".
"El Movimiento para la Justicia y la Igualdad (MJI) no está interesado en ese alto el fuego. Debería formar parte de un acuerdo y aportar iniciativas para que se pueda cumplir", ha declarado el portavoz del grupo El Tahir el Faki. Al Bashir ha informado de que un comité de observadores de la Misión de Paz de la ONU y de la Unión Africana en Darfur serán los encargados de hacer cumplir la suspensión de las operaciones militares del Ejército sudanés, a la que se ha comprometido el Gobierno.
Aún está pendiente que la Corte Penal Internacional se pronuncie sobre una petición de arresto contra el gobernante, solicitada por el fiscal jefe del tribunal, Luis Moreno Ocampo, que lo ha acusado de criminal de guerra y genocida. La orden de arresto tiene que ser ratificada aún por los jueces de la CPI, que han pedido documentación adicional antes de decidir al respecto. De confirmarse las diligencias judiciales, sería el primer gobernante en ejercicio que responde ante un tribunal internacional.
El Faki, también presidente del Consejo Legislativo del MJI, que tiene su sede en Londres, ha agregado que "está muy claro" que el anuncio de hoy de Al Bachir está vinculado con su juicio. "Tiene miedo de ser arrestado", ha afirmado, "y está intentando que no se avance en el proceso".
La guerra de Darfur estalló en febrero de 2003 y ha causado cerca de 300.000 muertos y unos dos millones y medio de desplazados.
