_
_
_
_
_

Normalidad y alta participación en las presidenciales de El Salvador

Más de cuatro millones de ciudadanos están llamados a las urnas para elegir al sucesor del actual mandatario

El Salvador acude a las urnas para elegir presidente en una jornada en la que la alta participación está siendo la nota dominante. Coches llenos de votantes vestidos de domingo o con los colores de los dos partidos contendientes llenan las caóticas calles de la capital, San Salvador. Las encuestas de opinión dan una ligera ventaja al candidato de la izquierda, Mauricio Funes, un antiguo periodista de la televisión que se presenta por el Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN), frente al candidato de la derecha, Rodrigo Ávila, del partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).

"Es la hora del cambio. Estamos cansados de este Gobierno, Promete cosas pero siempre hay más ricos que pobres", explica Reina Cano, de 22 años, sobre la situación en su país. "Funes va a ser diferente. Siempre ha sido honrado". Alrededor de un cuarto de la población salvadoreña vive en EE UU. El Gobierno estima que alrededor de 40.000 salvadoreños han volado en estos días a su país para poder participar en las elecciones.

Más información
El miedo vota en El Salvador

Los centros de votación han abierto sus puertas con normalidad a las 7.00 hora local (14:00 hora peninsular española) en el inicio a una jornada en la que unos 4,2 millones de votantes elegirán al sucesor del actual presidente, Elías Antonio Saca, del ARENA. La jornada electoral transcurre con normalidad y tranquilidad, según la valoración preliminar que el jefe de observadores de la UE, Luis Barrionuevo, ha hecho en una conferencia de prensa desde San Salvador.

En muchos centros de votación se registran filas numerosas de personas desde horas antes de su apertura. El Tribunal Supremo Electoral tiene previsto comenzar a emitir los primeros resultados oficiales a parir de las 19.00 hora local (02.00 hora peninsular española).

La tensión de los últimos días de campaña late en una ciudad acostumbrada a la violencia. Para calmar la situación, Funes ha pedido a sus seguidores que se mantengan en calma cuando ha acudido a votar, vestido con un traje gris. El miedo principal es que el resultado entre los dos candidatos principales sea ajustado, porque esto podría provocar las protestas de los dos bandos, después de una campaña electoral cargada de referencias a los tiempos de la guerra civil, ocurrida hace 20 años.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Elegir un candidato que no haya estado involucrado en la guerrilla en los tiempos de la guerra civil ha sido el acierto del FMLN, ya que por primera vez tiene, según las encuestas, posibilidades reales de ganar la contienda electoral frente al partido en el poder, ARENA. El candidato de este partido, Ávila, un ex jefe de la policía nacional, ha admitido públicamente haber matado rebeldes de izquierda durante el conflicto interno que sacudió al país, que mató a 75.000 personas, y ha mostrado su admiración por el creador de los escuadrones de la muerte que además fue fundador del partido.

Un observador comprueba una de las urnas de la elecciones presidenciales de hoy
Un observador comprueba una de las urnas de la elecciones presidenciales de hoyAFP
Una fila de personas espera para votar en Panchimalco, 17 km al sur de la capital, San Salvador, en las elecciones presidenciales que se celebran hoy.
Una fila de personas espera para votar en Panchimalco, 17 km al sur de la capital, San Salvador, en las elecciones presidenciales que se celebran hoy.EFE
Tres monjas salvadoreñas buscan el número de su colegio electoral para votar en las elecciones presidenciales que tienen lugar hoy en El Salvador
Tres monjas salvadoreñas buscan el número de su colegio electoral para votar en las elecciones presidenciales que tienen lugar hoy en El SalvadorREUTERS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_