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Entrevista:José Luis Morlanes | Presidente de La Seda | Empresas & sectores

"La CNMV ha estado muy presionada"

"No le negaré que estoy cansado". José Luis Morlanes lleva en la presidencia de La Seda 13 turbulentos meses, durante los que ha intentado poner las bases de un cambio de rumbo en una empresa que hace dos años pareció desmoronarse entre pérdidas muy superiores a las contabilizadas inicialmente, una deuda asfixiante, acciones legales entre la dirección anterior de Rafael Español ante la detección de operaciones irregulares y suspensiones temporales de empleo. Dice que ha cumplido su compromiso de "llevar a puerto seguro" a la compañía, tras atar una reestructuración financiera con la banca y a falta de poder iniciar, mañana, una ampliación de capital por 300 millones de euros, de los que asegura tener garantizados 250 millones. Si no, como ha recordado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en el horizonte está el concurso de acreedores. Después asumirá la presidencia, presumiblemente, Carlos Moreira, presidente de BA Vidro, futuro accionista industrial de la empresa.

"Teníamos que haber dedicado más tiempo a mejorar el control interno"
"Por el consejo no pasaron operaciones por las que se deciden responsabilidades"
"La mejor opción para los accionistas es ir a la ampliación"
"Tras la ampliación de capital, La Seda habrá reducido a la mitad su deuda"

Pregunta. ¿Y si no logra los 50 millones que le faltan?

Respuesta. Los habrá.

P. Comprenderá la frustración y la desconfianza de los inversores por poner dinero más dinero.

R. Yo también soy un pequeño inversor, así que comparto esa frustración. E incluso puedo entender que exista cierta desconfianza. Pero la mejor opción para recuperar el valor por parte de los accionistas, sin discriminación alguna, es ir a la ampliación, para conseguir un precio medio de la acción más bajo y esperando que el plan de reestructuración diseñado me lleve a recuperar el valor perdido. Además, iniciaremos una nueva etapa con un socio industrial (BA Vidro, que entrará en La Seda en la ampliación de capital) por primera vez desde que se marchó Azko Nobel en 1991. Un 40% del capital apoya ese proyecto industrial.

P. ¿Cómo se resume el lío armado en La Seda? ¿Descontrol?

R. En los años en que dominaron los criterios de la economía financiera y no los de la economía real, con cantidades ingentes de dinero barato en busca de operaciones de inversión, compramos compañías de forma muy rápida, cara y apalancada, como hicieron tantas otras empresas. Cuando se cortó el crédito y los mercados cayeron en volumen y en precio, nos pillaron sin el trabajo de integración hecho, sin poner en valor las sinergias. Eso es lo fundamental, como demuestra que en 13 meses hayamos superado esa situación. Hay que saber qué queremos ser: una empresa europea de packaging (envasado) en PET (material con que se elaboran envases de plástico en el sector de la alimentación y bebidas), y dejaremos los negocios en materia prima de PET, insostenibles.

P. Pero hubo agravantes. Y pecó todo el consejo, que estuvo ahí y lo aprobó todo.

R. El agravante fue la detección por el consejo de administración de determinadas operaciones irregulares que causaron pérdida de confianza del consejo en la dirección. Como atenuante, que no como eximente, diré que el consejo tenía difícil detectar un problema cuando se encontraba con balances proforma que crecían muchísimo de un año a otro. En 2006 teníamos uno enormemente mayor que el de 2005 porque hubo las primeras adquisiciones. En 2007 fuimos a otro de 1.200 millones. En 2008, a otro de 1.400 millones por otras adquisiciones. Si hubo falta de control interno, teníamos que haber dedicado más tiempo a mejorar el control interno, pero por el consejo no pasó ni una de las operaciones por las que hoy se están determinando responsabilidades.

P. Si todo les sale bien, la banca tendrá un 41% de La Seda. ¿Cómo les condicionará?

R. Los bancos aceptan convertir 150 millones de euros de deuda en capital, pasar el crédito restante de cuatro años a ocho con dos de carencia y convertir en deuda PIK (condicionado a la rentabilidad de la compañía) 210 millones. Después de la ampliación de capital, la deuda con recurso a La Seda se habrá reducido a la mitad, a poco menos de 500 millones de euros. La banca ha contribuido a la continuidad de La Seda con un sacrificio importante, pero ha entendido que con la continuidad ganaba más que con la no continuidad. Lo mismo han entendido los proveedores, que han aceptado reestructurar deuda, y los trabajadores, que han entendido que para continuar con 2.000 teníamos que prescindir de 300.

P. Tras la reestructuración, ¿pueden integrarse en BA Vidro o con eternas novias como Ercros?

R. En absoluto. Con nadie. Ni vamos a comprar nuevas empresas. En los próximos cinco años creceremos con nuestros clientes, con crecimiento orgánico. Pero somos una empresa cotizada. Mañana pueden oparnos.

P. ¿Cómo juzga el papel de la CNMV en esta historia?

R. Yo no soy nadie para juzgar a nadie. Pero le aseguro que tengo una opinión.

P. Dicen que usted cree que los pequeños accionistas -Morlanes se ha querellado contra la plataforma Unidos por La Seda por calumnias- han influido en la actuación del supervisor.

R. Todos hemos estado muy presionados. La CNMV ha estado muy presionada por los pequeños accionistas.

P. Pero comprenderá que no se fíen después de todo.

R. Pero no sé si eso debe llevar a tres juntas seguidas pidiendo la revocación del consejo. ¿Cómo un accionista puede estar a favor de un cierre de una empresa y no de su continuidad?

P. Aseguran que un núcleo duro portugués controla de facto la compañía. ¿Qué dice a eso?

P. Le digo que La Seda es una empresa de raíz catalana, de accionariado ibérico y con tremenda vocación multinacional. Ah, y el 80% de nuestro negocio lo hacemos fuera de España.

P. ¿No ha recibido ofertas de ninguna multinacional?

R. Ah, se refiere a Dolphin Energy. Les planteé si querían invertir en La Seda. No lo han hecho. Sí he tenido ofertas de fondo que querían quedarse con la empresa a capital cero, que nuestros accionistas no recibieran ni un euro. No las he aceptado. He tenido propuestas de suspensión de pagos sobre la mesa, valor cero para el accionista. Le recuerdo que soy el único miembro del consejo que está allí a título personal. En caso de responsabilidades, yo respondo con mi patrimonio familiar.

P. ¿Cómo interpretó la caída del 52,3% tras volver a cotizar?

R. Es duro ver caer el valor de tu empresa, pero no me sorprendió. La cotización ha ido hacia donde dijo el análisis independiente que encargamos a KPMG.

P. ¿La Seda, para usted, solo vale 0,10 euros, precio de la ampliación de capital?

R. Siento que el mercado ratifica nuestra posición en el tema. Pero claro que vale más. Tiene un valor intrínseco que irá creciendo en los próximos años. Este año haremos resultado operativo positivo, entre 50 y 65 millones. Y facturaremos en tono a 1.000 millones. Espero que a finales de año podamos concluir la enajenación de activos. Salimos con un plan de urgencia, pero hemos replanteado algunas de las desinversiones. Por ejemplo, mantendremos las dos plantas en Turquía, donde tenemos un 52% del mercado.

José Luis Morlanes, presidente de La Seda, en El Prat.
José Luis Morlanes, presidente de La Seda, en El Prat.CONSUELO BAUTISTA

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