_
_
_
_
_
Reportaje:

El dinero de plástico toca a su fin

El teléfono móvil comienza a reemplazar a las tarjetas y al efectivo como forma de pago

El teléfono móvil llevó la comunicación a otro nivel. Y combinado con Internet y las redes sociales, la experiencia del usuario cambió de forma radical. En la nueva era digital, la versión sin cables de la invención de Graham Bell sigue mutando y está a las puertas de asumir una nueva función: la de billetera electrónica.

La cadena estadounidense de cafeterías Starbucks decía hace pocos días que cada vez tiene más clientes interesados en pagar con el teléfono. En lugar de usar su tarjeta de crédito o de débito, el consumidor podrá pagar haciendo un simple gesto con su iPhone, Blackberry o los móviles con el sistema operativo Android de Google. Es, dicen los gurús tecnológicos, la evolución lógica.

Sprint, Citigroup y MasterCard se alían para desarrollar juntas el negocio

La firma Aite Group calcula que, hacia mediados de década, los pagos a través de móvil rondarán los 214.000 millones de dólares en EE UU. Es decir, que se multiplicarán casi por cinco los 46.000 millones que se prevén este año. Los analistas de Jupiner Research anticipan que, para entonces, uno de cada seis usuarios de móvil de ese país harán transacciones financieras con sus teléfonos.

Starbucks utiliza ya un sistema de pago muy simple, basado en la lectura de un código de barras que aparece en la pantalla del móvil, como en las tarjetas de embarque. No quieren esperar tres años hasta que se implanten los chips que permitirán a los móviles comunicarse con una terminal registradora situada a escasa distancia, gracias a una tecnología conocida como Near Field Communication (NFC).

En la actualidad hay 1.000 millones de tarjetas en las carteras de los estadounidenses, más de tres por habitante. Con ellas se hacen la mitad de las compras. Visa ya ha visto el nuevo filón. La compañía emisora de tarjetas de crédito forjó en abril una alianza con Square, una firma fundada por Jack Dorsey, uno de los creadores de Twitter, que es pionera en el desarrollo de aplicaciones de pago en los teléfonos interactivos. El lector externo de Square está sumando a su red unos 100.000 comercios al mes.

Pero hay otras vías para llevarse parte del negocio. Pocas semanas después de que se anunciara la alianza con Visa, que dará escala internacional a Square, se lanzaba Google Wallet. La firma más poderosa en Internet hacía piña con Sprint, Citigroup,

MasterCard y el sistema de pagos First Data.

La iniciativa de Google, basada en la tecnología NFC, funciona desde este verano en Nueva York y San Francisco. El objetivo es que sea aceptado como modo de pago en 124.000 puntos de venta del país que ya usan el sistema PayPass, y en 311.000 a escala global. "Esto permitirá trazar un puente entre nuestra tienda online y nuestros establecimientos", señalan desde los grandes almacenes Macy's.

La competencia para dar con la futura tecnología de pago con móvil es real. Hay varias docenas de compañías en EE UU trabajando juntas hacia esa meta, como la joint venture de AT&T, Verizon y T-Mobile, para crear la red de pagos por móvil ISIS. También están interesados en el negocio fabricantes de teléfonos y empresas de nueva creación en Silicon Valley como Bling, Boku,

Obopay y Zoompass.

Los responsables de banca electrónica de Bank of America ya anticipaban el año pasado que 2011 sería muy interesante y dinámico. "Hay muchos actores posicionándose de diferentes maneras, tratando de definir el terreno del futuro sistema digital de pagos", apuntan. Y el pago sin tarjeta de crédito, de débito o efectivo es solo el principio.

Al frente de ISIS está Michael Abbott, un veterano en los servicios financieros. El ejecutivo comenta que el dinero plástico sigue "estancado en la era del vinilo". Por eso cree que esta tecnología permitirá lanzar este tipo de pagos a la era digital. Las tres telefónicas ofrecen servicio de móvil a 200 millones de abonados en EE UU. Barclays será el primer usuario de la red.

Como Google, apuesta por el sistema NFC, que ya se usa en Europa, Japón y Corea del Sur. Pero llevará tiempo para que cuaje en EE UU. En la actualidad hay 303 millones de usuarios de móvil en el país. De ellos, 68 millones usan teléfonos interactivos. No se espera que el uso del NFC llegue a los ocho millones en tres años. Es decir, llevará tiempo crear una masa crítica.

A largo plazo, la vía del chip tiene más recorrido, coinciden los expertos. Pero, hasta entonces, parece que la opción de mostrar el código de barras en el móvil será la vía más práctica, porque no necesita cambiar el teléfono ni las terminales en el comercio. Para estos últimos la clave estará en que el sistema reduzca el fraude, eleve las ventas y reduzca costes.

Es decir, se trata de que cree valor para el negocio. Hay, además, otro punto que quieren desarrollar en el comercio con el nuevo sistema, y es que el registro se haga al entrar al local y no a la salida. Como indican desde la firma Mercator Advisor, la cosa va a ponerse realmente interesante a lo largo de este año. "Veremos cada vez a más gente saliendo de casa sin la cartera", auguran.

Cambio en los hábitos de consumo

Ed Labry, ejecutivo de First Data, una empresa que presta servicios de procesamiento de pagos, opina que el sector sabe desde hace tiempo que el cambio hacia la telefonía móvil tenía que producirse. "Lo que no se sabía es cuándo iba a ser realidad", dice.

La consultora Edgar Dunn & Company da por hecho que la billetera móvil reemplazará a la tarjeta de plástico. Pero señala también que "los hábitos de consumo tardan en cambiar".

El debate que está teniendo lugar desde finales del pasado año podría acelerar esa mutación, mientras plataformas sociales como Foursquare también tienen la aspiración de converger hacia ese nuevo centro. Esta compañía, lanzada hace dos años, ya permite a sus 10 millones de seguidores registrarse al entrar en un restaurante, una tienda o un museo. Su servicio facilita a los comerciantes locales dirigir publicidad y ofertas especiales a potenciales consumidores. Y esa interactividad en tiempo real va a cambiar la relación con el cliente. Un terreno que la alianza formada por Google para lanzar su billetera electrónica quiere explotar. "Los consumidores quieren que esta convergencia suceda", opinan desde la firma Mercatus. -

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_