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EL PROCESO DE PAZ

El guardia civil herido en Bogotá fue un 'topo' infiltrado en ETA

Presuntos atracadores mataron al compañero de Anido en un tiroteo

Joseph Anido, el agente que la Guardia Civil logró infiltrar cerca de la dirección de la organización terrorista ETA y llegó a realizar la función de chófer de Mikel Albisu, Antza, -el responsable del aparato político- hasta que fue descubierto por la banda armada, resultó levemente herido durante un tiroteo ocurrido el pasado jueves en el centro de Bogotá. En este suceso, que inicialmente se ha considerado un atraco frustrado, resultó muerto su compañero, el guardia civil Domingo Julio Gómez Franco.

La revelación de la identidad de Joseph Anido como el guardia civil herido en este suceso la efectuó ayer el diario Euskadi Información, afín a la izquierda abertzale. En medios oficiales, la identidad del agente herido es la de Antonio Cabana Romar. "José Antonio Martínez Anido ha confeccionado una falsa identidad conservando parcialmente su nombre, mientras que para los apellidos ha recurrido a los segundos apellidos de sus padres", afirmaba ayer el diario. Y añadía que la Embajada española ha ocultado en las declaraciones alusivas al agente herido que "se dedica a labores de contrainsurgencia en Colombia". Según el periódico abertzale, "Anido se desplazaba esporádicamente al Estado español en medio de grandes medidas de seguridad".La filtración de Anido en ETA fue hecha pública por la organización terrorista en mayo de 1995 y publicada en el diario Egin. En aquella fecha, ETA dio cuenta de que el topo se había infiltrado en la organización en 1989 a través de círculos antimilitaristas de Bayona. Su trabajo como conductor de Antza en Francia permitió conocer a los servicios de seguridad del Estado que la cúpula etarra se movía constantemente en coche.

Anido escapó de milagro. Fue descubierto cuando otro etarra que se alojaba en casa de sus padres en Estrasburgo vio un album de fotos en el que Anido aparecía vestido con uniforme militar. Al infiltrarse en la banda, el topo se había presentado como desertor del servicio militar. Los padres de Anido tuvieron tiempo de alertar a su hijo después de que el etarra abandonara precipitadamente el domicilio de sus huéspedes. Desde entonces, Anido estaba en paradero desconocido para ETA.

El suceso en el que Anido se vio envuelto en Colombia se produjo cuando los dos guardias civiles se encontraban cumpliendo "una labor que se les había encomendado", señalaron fuentes de la Embajada de España en Colombia. Según informa Pilar Lozano desde Bogotá, los dos guardias civiles, Domingo Julio Gómez Franco y Joseph Anido, fueron interceptados por cuatro hombres a bordo de dos motocicletas, en la avenida Cien, en un barrio de lujo de la capital colombiana. Eran las tres de la tarde y los dos agentes acababan de salir de una sucursal bancaria de la que habían retirado varios millones de pesetas. A continuación subieron a un Mazda gris con la intención de regresar a la sede diplomática española.

Anido conducía el coche. Al verse rodeado por los cuatro presuntos atracadores, disparó e hirió a uno de los asaltantes. Éstos respondieron con fuego. Según la policía, llegaron a disparar más de 15 tiros. Uno de ellos hirió mortalmente a Gómez, de 42 años, quien fue trasladado hasta una clínica cercana, donde falleció.

Anido, de 30 años, resultó herido en una pierna. Cojeando, logró salir del vehículo con el maletín deportivo en el que habían guardado el dinero. Logró huir en medio del atasco que se formó en la avenida por el tiroteo. Joseph Anido se repone en estos momentos de sus heridas en un centro hospitalario de Bogotá.

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Ayer se informó de la detención de tres personas sospechosas de haber cometido este crimen. Sus nombres se mantienen en reserva. Anoche fue repatriado a España el cadáver del guardia civil José Domingo Gómez.

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