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ETA atenta contra un mando de la Ertzaintza

Atutxa responsabiliza a KAS, a Herri Batasuna y a los "carroñeros" de 'Egin'

Joseba Goikoetxea Asla, de 42 años, sargento mayor de la Ertzaintza, militante del PNV y uno de los hombres fuertes de la policía vasca, se debatía ayer entre la vida y la muerte en el hospital de Basurto (Bilbao) tras ser tiroteado a bocajarro por un joven cuando acompañaba al colegio en su automóvil a uno de sus hijos, que resultó ileso. El primer atentado directo de ETA contra un ertzaina formado en la cantera policial vasca se produce tras una intensa y larga campaña intimidatoria contra la policía autonómica en el diario Egin y numerosas agresiones callejeras a (HB). El consejero del Interior, Juan María Atutxa, no dudó ayer en responsabilizar de este atentado a HB y a Egin, y les dedicó el calificativo de "carroñeros".

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Herri Batasuna había amenazado el pasado verano, pocos días después de que un grupo de jóvenes diera una brutal paliza a un ertzaina en Bilbao, con responder "de forma adecuada" a la policía vasca, a la que acusaba de "equipararse en brutalidad, intolerancia y chulería a las peores policías del mundo". El recuerdo de estas agresiones y amenazas, así como el de la línea intimidatoria mantenida desde hace dos años por el diario Egin, llevó ayer al consejero del Interior, Juan María Atutxa, a responsabilizar del atentado a los "estrategas de KAS", a HB , como "pantalla de la banda terrorista", y a los "carroñeros" de Egin, quienes "venían lubricando desde hace tiempo los gatillos de ciertas pistolas".El sargento mayor de la Ertzaintza ingresó en el centro sanitario a las 8.45 con una bala alojada junto al cuello. Su estado fue calificado por los médicos de "irreversible". Media hora antes, una persona se había acercado a pie hasta su automóvil y le había disparado dos tiros a bocajarro en la cabeza y en el cuerpo cuando se encontraba parado ante un semáforo en la calle de Tívoli, cerca del ayuntamiento de la capital vizcaína. Testigos presenciales han descrito al etarra como un joven moreno, con barba y vestido con pantalones vaqueros y chubasquero azul.

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Goikoetxea se disponía a llevar a la ikastola a uno de sus hijos, de 17 años. El joven pudo salir ileso del coche tras esquivar uno de los proyectiles. Uno de los testigos avisó a la policía e inmediatamente una ambulancia municipal trasladó al agente al centro sanitario. Durante el trayecto, el ertzaina sufrió una parada cardiorrespiratoria. Su mujer, al tener conocimiento del atentado, tuvo una fuerte crisis nerviosa.

Por la noche, el parte médico del hospital de Basurto continuaba hablando de "coma profundo". Tras haberle practicado un electrocardiograma, se le apreciaron "restos de actividad cerebral". Nada más difundirse la noticia, comenzaron a llegar al pabellón de urgencias Makua dirigentes del PNV como Ricardo Ansotegui, Gorka Aguirre y Luis María Retolaza, y representantes de las instituciones vascas como el diputado de Vizcaya José Alberto Pradera, el alcalde, Josu Ortuondo, y el consejero del Interior, Juan María Atutxa.

Este último, visiblemente consternado, ensalzó la figura de Goikoetxea como la del "vasco y abertzale que luchó contra el franquismo y que está luchando contra otra dictadura del más claro rasgo fascista [en alusión a ETAJ". En la actualidad, Goikoetxea estaba separado del cuerpo tras haber sido condenado a seis años y un día de inhabilitación por las escuchas ilegales al ex lehendakari Carlos Garaikoetxea, en el verano de 1986.

Atutxa pidió a la sociedad vasca que desde la serenidad y la calma no se calle y "exteriorice su reproche y repugnancia por estos hechos". Y pidió a los votantes de HB para que dejen de apoyar electoralmente a "la pantalla de la banda terrorista" y ser corresponsables de sus asesinatos. Pidió también a los presos de ETA que "den un paso al frente", abandonen el colectivo y ayuden a la policía".

Atutxa evitó hablar de "ataque frontal al PNV", valoración que sí realizaron algunos dirigentes nacionalistas, pero advirtió: "Seguiremos persiguiendo a quienes, de la forma más cobarde, ejerzan cualquier estrategia violenta que pretenda llevar a la ruina a este país". En una nota hecha pública a última hora de la tarde de ayer, la dirección del PNV dijo: "Sepa el diario Egin, sepa KAS y sepa ETA, que les consideramos un todo que ha atentado directamente contra el PNV y que desde esta valoración serán tratados por este partido".

La brutal paliza que unos jóvenes propinaron en el verano a un ertzaina fue justificada por HB como una respuesta a las "injustificadas provocaciones", tras el desalojo de un local de esta coalición. HB acusó a PNV y PSOE de utilizar a la policía autonómica como "verdadera policía política", y advertía que respondería "de forma adecuada". Un día más tarde, el 27 de agosto, Jarra¡ (las juventudes de HB) amenazaba con repetir ataques contra los agentes del cuerpo, porque, decía, "donde siembran odios, recogen tempestades, y donde las dan las toman".

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