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Absuelta una pareja acusada de proporcionar información a ETA

Según la Audiencia Nacional, no se ha probado que Ibon Urrestarazu y Alaitz Iturrioz ayudaran a ETA a atentar contra un concejal socialista en 2001

La Audiencia Nacional ha absuelto este martes a Ibon Urrestarazu y Alaitz Iturrioz, que estaban acusados de realizar labores de seguimiento e información para que ETA atentara en 2001 contra el concejal socialista de Ordizia (Guipúzcoa) Iñaki Debreuil. La Sección Tercera de lo Penal considera que no hay elementos que prueben su colaboración en el ataque con coche bomba cometido en febrero de ese año en San Sebastián, en el que Debreuil fue herido levemente, aunque murieron dos personas.

El atentado tuvo lugar el 22 de febrero de 2001 a la salida de la estación de tren del barrio donostiarra de Martutene. Los terroristas utilizaron un coche cargado con 15 kilos de explosivo plástico que hicieron explotar cuando Dubreuil salía de la estación camino de la empresa en la que trabajaba. Debido a un error de cálculo, la explosión tan sólo hirió levemente al concejal, pero causó la muerte a José Angel Santos y Jesús Leonet, trabajadores de la empresa Elektra, e hirió gravemente a otras seis personas.

Pese a que el fiscal Enrique Molina pedía para ellos 155 años por dos delitos de asesinato terrorista, seis de tentativa de asesinato y uno de estragos terroristas, los jueces señalan en la sentencia que ETA manejaba información sobre el concejal socialista "al menos desde marzo de 2000", mucho antes de la fecha en la que se cree que los acusados entraron en contacto con la organización terrorista.

Información inexacta

La sentencia indica que la información manejada por ETA -incautada en el registro realizado en 2001 en el domicilio que tenían en Zizurkil (Guipúzcoa) Ibon Etxezarreta, Luis María Carrasco y Patxi Xabier Makazaga, los tres presuntos etarras que estaban acusados de ser los autores materiales del atentado contra Dubreuil y que fueron absueltos por falta de pruebas en mayo de 2004- contenía "inexactitudes" imposibles de cometer por alguien de Ordizia, "un pueblo pequeño", de unos 9.000 habitantes, y en el que "todos se conocen".

De este modo, señala que en la localidad guipuzcoana era conocido que el concejal socialista "iba con un escolta" así como que "se desplazaba a pie", por lo que es impensable que alguien del pueblo pudiese cometer "errores informativos" como los señalados en la documentación de los etarras, que aseguraba que el concejal iba siempre acompañado por dos escoltas y que utilizaba un vehículo, extremo que fue desmentido por Dubreuil durante el juicio.

Los magistrados también indican que en el registro del domicilio que comparten Iturrioz y Urrestarazu, realizado el mismo día de su detención (16 de noviembre de 2004), "tampoco apareció documentación alguna al respecto" ni ningún "elemento incriminatorio".

Por último, la sentencia afirma que el atentado puede ser atribuido "a múltiples comandos de ETA". "No puede apreciarse exista prueba de pacto alguno con unos autores materiales así indeterminados", resalta el tribunal. Por todo ello, la sentencia absuelve a ambos y ordena su inmediata puesta en libertad.

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