Absueltos los nueve acusados por la explosión de una pirotecnia que causó cuatro muertos

La Sección Tercera de la Audiencia de Girona ha absuelto al dueño de la pirotécnica Brau de Vidreres (Girona) y al resto de los acusados de homicidio imprudente por la explosión mortal en la fábrica el 3 de junio de 1993, en la que murieron cuatro empleados. El tribunal señala en la sentencia que no se ha podido concretar los productos pirotécnicos que había en la nave donde se produjo la explosión ni la causa de ésta.

Al inicio del juicio, las acusaciones particulares que ejercieron los familiares de las víctimas reclamaban para los dos dueños de la pirotecnia y para siete personas más relacionadas con temas de seguridad penas de hasta cinco años de prisión y una indemnización de casi 900.000 euros.

Los nueve acusados por la explosión en la pirotecnia Brau eludieron durante el juicio toda responsabilidad en la tragedia durante sus declaraciones en la Audiencia de Girona. Los dueños reconocieron que las cuatro víctimas mortales de la explosión no estaban dadas de alta en la Seguridad Social en el momento de los hechos, pero se han excusado explicando que se trataba de una empresa familiar.

Los absueltos son, además de un agente de la Guardia Civil, los dueños de la empresa, el encargado de la fábrica y los dueños de compañías proveedoras de Brau, entre ellos Juan Vicente Jurado, actualmente concejal de Alumbrado del Ayuntamiento de Valencia.