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La Audiencia de Alicante rechaza la puesta en libertad provisional del cerebro del 'caso Polop'

El tribunal ve indicios que "fundamentan" la imputación del ex alcalde Juan Cano en el asesinato de su antecesor

La Audiencia de Alicante ha desestimado hoy la puesta en libertad provisional de Juan Cano, ex alcalde de Polop, del PP, en prisión por planear supuestamente el asesinato a manos de dos sicarios de su antecesor en el puesto, Alejandro Ponsoda. Los magistrados de la sección segunda aprecian "indicios que fundamentan la imputación" de Cano, "especialmente la prueba testifical, destacando la declaración del testigo protegido" que le apunta como el cerebro del crimen.

La resolución de la Audiencia de Alicante responde al recurso de apelación de la defensa de Cano al auto de prisión dictado por la juez instructora el pasado 26 de noviembre. Junto a Cano, la juez envió a prisión a otras seis personas, entre ellas los dos pistoleros checos que supuestamente dispararon a Ponsoda a las puertas de su casa en octubre de 2007. La investigación sostiene que el crimen se fraguó en el reservado del club de alterne Mesalina, a las afueras de Benidorm. Un testigo protegido (un portero del lupanar) ubicó a Cano en las reuniones preparatorio del crimen de Ponsoda.

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En la vistilla del recurso de apelación, celebrada el pasado miércoles, la defensa de Cano aseguró que ninguno de los tres pilares en los que, según la investigación judicial, se sustenta la imputación de su cliente es creíble. "No existen indicios acreditados sobre su culpabilidad, ninguno del resto de imputados le ha implicado y el testigo protegido miente y se contradice sobre cuándo, quién y dónde se celebraron las reuniones en club", aseguró. "Por tanto, certificado su arraigo y dado que no hay riesgo de fuga no hay ninguna razón en justicia para mantenerlo en prisión", concluyó el abogado de Cano.

El fiscal mantuvo una tesis diametralmente opuesta. A su juicio, sí que hay suficientes indicios, entre ellos, la declaración del testigo protegido, "una persona que no conocía al acusado, que no tiene ningún interés espurio contra él y, además, lo identificó en unas fotografías". "Por tanto, y dado que la instrucción no está acabada, su puesta en libertad podría poner en riesgo las diligencias", añadió. Mientras, el letrado de la acusación particular en nombre de la familia de la víctima se sumó a la tesis del fiscal y resaltó el perfil del acusado. "En el crimen subyace la batalla política del PP en Polop por el poder y, sobre todo, el ansia de Cano por controlar el urbanismo. El ex alcalde tenía atemorizados a sus compañeros de partido, y al propio Ponsoda. Actuaba como un cacique, era soberbio y despota, hasta el punto de que la actual alcaldesa ha declarado que si Cano queda en libertad se va del pueblo", argumentó.

En su auto, la Audiencia alicantina asume ahora las tesis del fiscal y la acusación particular. "Muchos de los datos por éste (el testigo protegido) aportados, especialmente con relación a los presuntamente implicados en la muerte, resultan ratificados en la declaración de Raúl Montero (otro de los siete encarcelados)", señala el auto. "Todo ello, sin olvidar las declaraciones que dan cuenta de la tensa relación que mantenía el imputado y el fallecido en su función de regidores del Ayuntamiento", añade. Sobre la base de estos razonamiento, más la gravedad del delito y para evitar el riesgo de fuga del imputado, la sala descarta su puesta en libertad provisional.

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