Bono propondrá que en enero y julio pueda haber plenos y comisiones

El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, ha recogido el guante lanzado este martes por el presidente del Senado, Javier Rojo, acerca de las criticadas vacaciones parlamentarias. Al igual que Rojo, que propuso habilitar los meses de julio y enero para el periodo de sesiones, Bono enviará esta misma semana una carta a los grupos parlamentarios para proponerles que en enero y junio pueda haber sesiones plenarias y comisiones, sin "cambiar" la Constitución Española.

Bono, que ha hecho este anuncio a preguntas de los periodistas después de una reunión en Mérida con el presidente de la Junta de Extremadura, ha desvelado que este martes ya trató de este asunto, individualmente, con algunos de los portavoces de los grupos parlamentarios. En rueda de prensa, el presidente del Congreso ha explicado que la Constitución Española impide que enero y junio formen parte de los periodo de sesiones ordinarios, pero hay quien interpreta que lo que hay "es pura y simplemente la consecuencia del poco deseo de trabajar de los diputados". "Eso es rigurosamente falso; [por ello] no podemos contribuir a que la imagen errónea sea alimentada por un modo de actuar por nuestra parte errático", ha añadido Bono.

¿Qué pasa en Europa?

La propuesta de ampliar el periodo de sesiones parlamentarias no es, ni mucho menos, nueva, aunque ha tomado un nuevo brío a cuenta de la crisis y los esfuerzos que el Gobierno pide a todos para salir de ella. Hace un año, PP y PSOE anunciaron iniciativas para que enero fuera declarado mes hábil, pero la propuesta quedó en el olvido. Los parlamentarios recuerdan que el hecho de que no haya plenos no quiere decir que no haya actividad, porque puede haber reuniones de la Diputación Permanente o se pueden convocar plenos extraordinarios.

A pesar de que Bono plantea no tocar la Constitución, su artículo 73 establece que "las Cámaras se reunirán anualmente en dos periodos ordinarios de sesiones: el primero, de septiembre a diciembre, y el segundo de febrero a junio", es decir, que en el Senado, al igual que en el Congreso, se consideran inhábiles los meses de enero, julio y agosto. Todos los grupos coinciden en que el artículo es una reminiscencia del pasado en la que era difícil el desplazamiento a la capital y los gobiernos necesitaban periodos libres de actividad parlamentaria para ejercer su función.

A propósito del debate, el Parlamento Europeo echa el cierre a su trabajo parlamentario sólo en el mes de agosto, pues durante el resto del año celebra al menos una semana plenaria cada mes. Los diputados del Parlamento Europeo tienen un calendario anual de trabajos que se divide en 12 periodos de cuatro días para sesiones plenarias en Estrasburgo y seis periodos de dos días para sesiones plenarias en Bruselas, según fuentes del Europarlamento. Además, hay dos semanas al mes para reuniones de comisiones parlamentarias y delegaciones interparlamentarias, una semana al mes para reuniones de los grupos políticos y cuatro al año dedicadas en exclusiva al trabajo y a la presencia del diputado en su circunscripción.

Así, todos los meses del año celebran una sesión plenaria de unos cuatro días de duración, salvo en septiembre que hay dos plenos para recuperar el mes de agosto. En concreto, para este año 2010, según el calendario, establecieron un día más de pleno en cinco mes -febrero, marzo, mayo, octubre y noviembre.