Botella ¿alcaldesa?
"Es absolutamente mi previsión, no tengo otro proyecto", respondía Alberto Ruiz-Gallardón antes de las elecciones de mayo (que ganó con mayoría absoluta) a la pregunta de si agotaría la legislatura. Pero por mucho que lo repitiera, la oposición no le creyó o eligió no creerle, consciente de lo mucho que cambiarían las cosas (presumiblemente, a su favor) si el alcalde fuera nombrado ministro y tuviera que dejar el bastón de mando... a Ana Botella. Pero eso aún no ha ocurrido, y podría no suceder, así que ayer imperaba la prudencia. El portavoz municipal socialista, Jaime Lissavetzky, afirmó que es "lícito" y "compatible" que Gallardón sea alcalde y diputado, aunque recordó que su partido ha preferido evitar esas duplicidades. El líder del PSM, Tomás Gómez, fue más allá: "Ha aprovechado que Esperanza Aguirre está muy débil políticamente y ha pegado el salto a la política nacional". IU también se mostró crítica: "La alcaldía tiene entidad suficiente como para que sea una dedicación exclusiva". Y el líder municipal de UPyD, David Ortega, cargó contra la posibilidad de que Gallardón pudiera dejar la alcaldía a Botella: "Es una falta de respeto, los ciudadanos, que no la han votado: si no quiere seguir, debería haberla puesto a ella de candidata".