Bruselas considera ilegal el 'céntimo sanitario' que aplican las autonomías

Hacienda defiende su validez, pero se muestra abierta a pactar con la Comisión

Barcelona - 07 may 2008 - 00:00CEST

Bruselas sigue su particular cruzada contra el céntimo sanitario, que el Gobierno y seis comunidades autónomas aplican, en algunos casos desde 2002, sobre la venta de carburantes, y cuya recaudación -más de 400 millones de euros entre las seis en 2007- se utiliza para financiar la sanidad. La Comisión Europea dictaminó ayer que esta figura tributaria vulnera la legislación comunitaria y exige a España que la modifique. Si no lo hace en el plazo de dos meses, el Ejecutivo comunitario podría llevar el caso ante el Tribunal de Justicia de Luxemburgo.

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La recaudación de las autonomías supera por primera vez los 100.000 millones

La Comisión anunció en un comunicado el envío a España de un dictamen motivado, el segundo paso en los procedimientos de infracción. La Comisión ya había mandado sendas cartas de emplazamiento al Gobierno español, una en 2003 -tras la puesta en marcha del céntimo sanitario en 2002- y otra en 2006. Desde esa fecha, el Gobierno socialista ha mantenido "varias conversaciones" con Bruselas, pero sin llegar a ningún acuerdo.

El Ministerio de Economía y Hacienda defiende la legalidad de esta figura tributaria -formalmente se llama Impuesto de Ventas Minoristas de Determinados Hidrocarburos-, pero se muestra "abierto y flexible" a buscar vías de solución con la Comisión Europea, aseguró ayer un portavoz del ministerio. Eso sí, "siempre que las comunidades autónomas mantengan la capacidad normativa sobre el impuesto", subrayó.

A Bruselas el céntimo sanitario no le gusta, sobre todo por dos razones. La primera, porque se aplica después de haber gravado el impuesto especial sobre hidrocarburos, que está armonizado en toda la UE. Es decir, se grava cuando los productos -los carburantes- se venden al comprador en la gasolinera, y no antes.

Hacienda no considera esto un escollo insuperable: "Si Bruselas quiere que lo gravemos antes, nos pondremos de acuerdo", avanzaron fuentes del ministerio.

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La segunda razón se aventura más espinosa. La Comisión Europea entiende que el impuesto español no tiene una "finalidad específica" -contribuir a financiar el gasto sanitario-, tal y como exige la legislación comunitaria. Sostiene que su objetivo es "fortalecer la autonomía de las comunidades proporcionándoles los medios para generar ingresos fiscales".

"Si lo que pretende Bruselas es que las comunidades autónomas no tengan capacidad normativa, nos van a tener enfrente", según fuentes del ministerio de Economía y Hacienda.

El céntimo sanitario permite a las autonomías aplicar un recargo máximo de 2,4 céntimos por litro de carburante para destinarlo íntegramente a financiar la sanidad. Hasta el momento, lo utilizan Madrid, Galicia, Cataluña, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Asturias.

Esta última, por ejemplo, lo aplica desde 2004, con la oposición de los transportistas, tanto de mercancías como de pasajeros. Asturias recauda alrededor de 20 millones de euros por este concepto, informa Javier Cuartas.

El céntimo permite subir hasta dos céntimos el precio de la gasolinaVídeo: ATLAS

GALICIA. 380 millones recaudados en cuatro años

Galicia ya ha recaudado 380 millones de euros en cuatro años por el céntimo sanitario, informa Xosé Hermida. El Gobierno gallego fue, después de Madrid, el segundo en aplicarlo. La Xunta de Fraga lo aprobó en 2003 y lo cobra desde 2004, con fuerte oposición de la patronal gallega.El Gobierno actual (PSOE y BNG) no ha tocado el impuesto desde 2005 y prevé ingresar este año 96 millones de euros. La Xunta cobra 2,4 céntimos por cada litro de gasolina vendido en Galicia y 1,2 céntimos por litro de gasóleo. Sin embargo, desde septiembre de 2007 los camioneros reciben una compensación (entre 103 y 964 euros por camión al año) por el alza del gasóleo.

CATALUÑA. La sanidad es la prioridad, según los consumidores

Cataluña prevé recaudar 171,4 millones de euros en 2008 (en 2007 recaudó 160) por el céntimo sanitario, informa Ana Pantaleoni. El tripartito siguió la estela de otras comunidades e implantó en agosto de 2004 la tasa autonómica que grava los carburantes aplicando el máximo recargo que permite la ley.El objetivo era hacer frente al déficit de la sanidad y la medida fue recibida por los automovilistas con resignación. El nuevo impuesto fue calificado por los Consumidores y Usuarios de Cataluña como "justificable porque la sanidad tiene prioridad". El Departamento de Economía consensuó una serie de compensaciones económicas para paliar el impacto en el sector del transporte.

C. VALENCIANA. Un ingreso cercano a los 65 millones anuales

La Generalitat aplica el céntimo sanitario desde 2006, como consecuencia del Plan de Estabilidad Presupuestaria, pactado con el Ministerio de Economía para hacer frente al elevado déficit que ha hecho de la Comunidad Valenciana la autonomía con mayor deuda per cápita, informa Miguel Olivares.En la Comunidad Valenciana, el litro de gasolina se grava con 2,4 céntimos; el de gasóleo, con 1,2 céntimos. El Consell evitó precisar ayer cuánto ha recaudado en los dos últimos años, pero el presupuesto para 2008 estima unos ingresos de 66,5 millones de euros y el de 2007, cifraba el ingreso previsto en 65 millones. El presupuesto de Sanidad es de 4.500 millones.

MADRID. Un impuesto congelado desde hace cinco años

El Gobierno de Esperanza Aguirre (PP) recaudó alrededor de 90 millones de euros en 2007 por el céntimo sanitario, que en Madrid grava con 1,7 céntimos cada litro de gasolina y de gasóleo, informa Soledad Alcaide. Fue una iniciativa del anterior presidente, Alberto Ruiz-Gallardón, en 2002 sin el apoyo de la oposición. Aguirre lo mantiene congelado desde 2003.Este año prevé ingresar otros 90 millones. La presidenta llegó a anunciar que lo suprimiría, dentro de su política general de rebaja de impuestos, pero la cuantía de la recaudación la disuadió. La Sanidad madrileña se come una gran parte del presupuesto: en 2008, 6.953 millones de euros, el 36,63%.