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La polémica sobre la financiación autonómica

CiU y ERC piden a Montilla que haga un frente catalán

Los nacionalistas se oponen a que la crisis económica afecte a la negociación

La advertencia lanzada por el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, en el artículo publicado ayer en EL PAÍS, sobre el riesgo que entraña mantener una financiación injusta para esa comunidad ha encontrado apoyo en CiU, ERC e ICV. Los convergentes quieren "un frente común de todos los partidos catalanes", igual que Esquerra Republicana. El PSC lleva tiempo reclamando a los nacionalistas que se sumen a la negociación.

El portavoz de CiU en el Parlamento catalán, Oriol Pujol, se sumó a Montilla al asegurar que la federación nacionalista "no aceptará la excusa de la crisis económica" para frenar la reforma -argumento que esgrimió el pasado miércoles Felipe González-, porque el Estatuto "ya está negociado y ahora lo único que hace falta es aplicarlo".

En el PSOE, no sólo hay diferencias de concepto, también de procedimiento
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Pujol aprovechó para arremeter contra pesos pesados del PSOE. "Los propios socialistas y el Gobierno de Rodríguez Zapatero quieren retardar una financiación justa. Bono, González, Guerra y Solbes son compañeros de partido de Montilla y son ellos mismos los que ponen trabas".

También el consejero de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet, de ERC, pidió que CiU se implique en la negociación. "Lo primero que hemos de hacer es que el Gobierno catalán haga un frente común con la oposición en Cataluña".

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Para el presidente de Iniciativa per Catalunya (ICV), Joan Saura, las tesis de Montilla son "una respuesta muy positiva" a aquellos dirigentes socialistas que creen que no es el momento de reformar el sistema de financiación, informa Joan Foguet. "No sé qué se piensan que hacemos en las comunidades autónomas, quizás que pasamos el día jugando a golf o a tenis", se despachó.

Montilla respondió con su artículo a los movimientos que detecta en el PSOE para retrasar la negociación de la nueva financiación autonómica. El nuevo Estatuto de Cataluña fija que agosto sea la fecha límite para aprobar ese modelo de financiación que sustituya al actual, que Cataluña considera injusto. Un artículo del ex presidente del Gobierno Felipe González en EL PAÍS argumentando que se debe aplazar este asunto dada la difícil coyuntura económica. La propuesta de González fue secundada por otros dirigentes regionales del PSOE.

Los planes y plazos de la dirección del PSOE han sufrido una alteración sustancial pero sus dirigentes no se dan por vencidos y volverán a marcarse las líneas discretas de actuación para que todos los socialistas, incluidos su partido hermano, el PSC, acuerden un nuevo sistema de financiación autonómica. Así lo expresaron ayer fuentes de la dirección socialista tras el golpe en la mesa de Montilla, que ha sacudido a toda la organización.

De momento no sólo hay diferencias de concepto sino también de procedimiento. Así, en el PSOE se preguntan por qué hay que forzar una negociación a toda velocidad cuando la materia es muy complicada y necesita armonizar muchos intereses. Esta es la tesis de la responsable federal de Política Autonómica del PSOE, Carmen Hermosín. "No hay que sacralizar una fecha; ahora tiene que empezar la negociación, primero entre socialistas y, después, con todos los demás". Hermosín quiere creer que "José Montilla va a ser copartícipe del acuerdo y debe entender que no sólo hay riesgos en Cataluña, porque también los hay en otras comunidades". Esta dirigente socialista forma parte del equipo, dirigido por José Blanco, secretario de Organización, e Inmaculada Rodríguez-Piñero, responsable federal de Economía, que trabajará por el acuerdo entre socialistas. Desde Níger, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, abogó, no obstante, por el "cumplimiento de los plazos". Este asunto será debatido mañana en la reunión de la ejecutiva federal, que preside José Luis Rodríguez Zapatero.

"Yo creo que puede y debe haber acuerdo si todos somos capaces de ponernos en lugar del otro; para mí, los problemas de los ciudadanos de Cataluña son los míos, pero quiero que sea también a la viceversa". Esta es la opinión del presidente de Extremadura, Guillermo Fernández-Vara, que se ve retratado en algunos pasajes del artículo de Montilla.

La concreción de un nuevo modelo requiere la unanimidad de todas las autonomías, a juicio del líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, quien emplazó a Rodríguez Zapatero a que convoque una Conferencia de Presidentes para abordar este asunto. Según Rajoy, la nueva financiación autonómica "no se puede hacer sobre la base de que a unos les vaya mejor que a otros".

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