_
_
_
_
_

CiU exigirá dirigir la política económica para pactar con el PSOE tras el 9-M

Convergencia i Unió (CiU) parece empeñada en vender la piel del oso antes de cazarlo. Falta más de un mes para las elecciones generales, pero el optimismo de Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida no decae y desde hace meses van pregonando la decisiva influencia que tendrá CiU, en su opinión, para la configuración de una mayoría parlamentaria. Si se cumplen sus vaticinios, los nacionalistas apuntarán alto: pedirán "dirigir" la política económica del Gobierno, según anunció ayer Artur Mas. ¿Un ministerio para el democristiano Duran? En absoluto, vino a decir el líder convergente: se "puede influir" sin estar en el Consejo de Ministros.

Entre la "frivolidad" del PSOE y el "partidismo" del PP, sólo CiU, señaló Mas, puede aplicar unas recetas que devuelvan la confianza.

Mas no escogió un buen día para lanzar este mensaje. La Sindicatura de Cuentas, el organismo que fiscaliza las finanzas de la Generalitat, alertó ayer de nuevas y graves irregularidades de los Gobiernos de Jordi Pujol. La Sindicatura no ha hallado los justificantes del 95% de las subvenciones concedidas por la Generalitat entre 1991 y 2001 para cursos de formación con cargo a fondos Europeos. Y eso que el gasto fue importante: 1.505 millones de euros.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_