España se muestra dispuesta a acoger presos de Guantánamo si la ley lo permite
Miguel Ángel Moratinos y Hillary Clinton inauguran "una nueva etapa" en la relación bilateral con una reunión en el Departamento de Estado
El ministro español de Exteriores, Miguel Angel Moratinos, ha abierto este martes, al reunirse con la secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, una "una nueva etapa" en la relación entre los dos países. Al menos así lo ha afirmado al término del encuentro, el primero entre miembros del Gobierno español y estadounidense desde que Barack Obama se hiciera con el cargo de presidente de EE UU. Como prueba de ese mejor entendimiento, Moratinos ha expresado la disponibilidad de España para acoger a presos de Guantánamo cuando se cierre el penal.
Según ha relatado el jefe de la diplomacia española al término de un encuentro de aproximadamente media hora, ella misma ha pedido la ayuda de España para acoger a detenidos del penal de la base estadounidense en Guantánamo (Cuba). Moratinos se ha mostrado "en principio de acuerdo a colaborar en la acogida de algunos presos, siempre y cuando las condiciones jurídicas sean aceptables".
A preguntas de los periodistas, el ministro español ha aclarado que su reunión con Clinton no tenía como objetivo fijar una fecha para un encuentro entre el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el estadounidense. Ambos, en todo caso, coincidirán el próximo 2 de abril en la cumbre del G-20 que se celebrará en Londres y en los días posteriores en Estrasburgo y Kehl en los actos del 60º aniversario de la OTAN. Según el ministro, la reunión tenía como fin establecer una agenda que siente las bases para la nueva relación bilateral.
Por su parte, Moratinos se volverá a ver con Clinton en la conferencia internacional para la reconstrucción de Gaza convocada por Egipto el próximo 2 de marzo y después en una reunión ministerial en Bruselas. La secretaria de Estado norteamericana pidió también al ministro que trasladara un saludo de Obama al Rey y Zapatero.
Moratinos es el quinto ministro de Asuntos Exteriores europeo en entrevistarse con la secretaria de Estado, después de los ministros británico, francés, alemán y checo.
