_
_
_
_
_
Plan de choque de Zapatero

Fomento recorta 6.400 millones en inversión pública en dos años

Blanco anuncia un cambio radical en la política de infraestructuras

"Se acabó la alegría" en la obra pública. El ministro de Fomento, José Blanco, finiquitó ayer en el Congreso la política de infraestructuras de los últimos años en la que "había que tener de todo en todas partes" y todo se pagaba con dinero público. La crisis económica se ha llevado por delante la era dorada de las obras públicas en España, durante la que se invirtió el doble que en otros países europeos, pero toca recortar y Fomento tendrá que prescindir de otros 1.500 millones este año, que se suman a los 1.760 millones que ya se le habían restado en febrero.

En total, 3.260 millones menos para inversión sobre un presupuesto para el ministerio y sus empresas asociadas de 17.200 millones este año. El ajuste se repetirá en 2011, de manera que de los 6.000 millones de recorte de inversión pública en dos años anunciado hace una semana por el presidente Zapatero, el 80% (unos 4.700 millones) corresponde a Fomento y el resto al Ministerio de Medio Ambiente.

Más información
Zapatero anuncia una subida de impuestos para "los que realmente más tienen"
El Gobierno rebaja medio punto la previsión de crecimiento en 2011
El PSOE reconoce que el parón en las obras le perjudicará para las elecciones autonómicas

Además del recorte, Blanco anunció un plan de eficiencia en la planificación y ejecución de obra pública, con medidas que según el ministro no se realizaban, como por ejemplo el análisis de previsión de demanda para valorar la viabilidad económica de las obras, o el estudio de las necesidades de mantenimiento. El ministro sostuvo que se ha rebajado el coste del kilómetro de autovía un 17% este año, que se pretende reducir al 22%. Asimismo, anunció que se venderán las participaciones de Fomento en 16 empresas, que reportarán 21,8 millones. El recorte de gasto corriente y personal sumará 1.198 millones hasta 2013.

Los efectos concretos del recorte están aún por definir: no hubo ningún detalle sobre qué obras van a ser retrasadas (Blanco avanzó que en general se demorarán un año), qué proyectos se quedarán en el papel, qué contratos serán rescindidos y cuáles pasarán a ser financiadas con el Plan Extraordinario de Infraestructuras (PEI, de 17.000 millones) público privado, que en principio tenía que detallar en la comparecencia de ayer, de más de cuatro horas. El ministro explicó que con el nuevo recorte tiene que replantearlo, de modo que se comprometió a hacerlo en cuanto sea posible. Sólo puso como ejemplo que la autovía Lugo-Santiago, de la que se ha ejecutado muy poco, puede pasarse a ese plan.

El portavoz del PP, Andrés Ayala, auguró que no va a funcionar y reprochó al Gobierno su "permanente improvisación" y al ministro la falta de concreción de ese plan. Una crítica en la línea de la que expresó el diputado de ERC Joan Ridao, que afeó a Blanco el que no haya establecido criterios sobre qué actuaciones son prioritarias, al tiempo que señaló las consecuencias del recorte inversor en la actividad económica.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

También por ese flanco atacó el diputado Joan Herrera (ICV), que agradeció el abandono de la política del "nuevo rico" que hacía sacar pecho al Gobierno porque España sea el país europeo con más kilómetros de AVE o de autovías, que ayer Blanco también recordó.

Tanto José Ramón Beloki (PNV) como Pere Macías (CiU) se mostraron comprensivos con el planteamiento del ministro, si bien el primero advirtió de la necesidad de salvar al máximo la inversión productiva. "Si no, nos hundimos, ministro", le dijo, y le pidió seriedad y rigor. Macías le reprochó a Blanco lo "flojito" de su plan de austeridad e insistió mucho en la necesidad de buscar maneras de financiar las infraestructuras sin recurrir a las arcas públicas, por ejemplo con peajes para que quien usa la infraestructura, la pague.

José Blanco, ministro de Fomento, y Salvador de la Encina, presidente de la Comisión de Fomento, ayer en el Congreso.
José Blanco, ministro de Fomento, y Salvador de la Encina, presidente de la Comisión de Fomento, ayer en el Congreso.LUIS SEVILLANO

La tijera en obras públicas

- El Ministerio de Fomento ya asumió un recorte de 1.760 millones en febrero en inversión pública, a los que se suman ahora otros 1.500 millones, sobre una inversión prevista de 17.200 millones.

- El próximo año se aplicará un recorte similar al de este año, de otros 3.200 millones, de modo que habrá 6.400 millones menos para obras públicas del grupo Fomento en 2010 y 2011.

- Fomento asegura que ha reducido un 25% su gasto corriente respecto a 2008, y pretende rebajarlo hasta el 40% en 2013. El ahorro entre 2010 y 2013 en personal y gasto corriente suma 1.198 millones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_