Hallado un artefacto explosionado por ETA en Huesca

Artificieros y miembros de los grupos de alta montaña de la Guardia Civil de Aragón y Navarra localizaron a las ocho y media de la mañana de ayer en Borau (Huesca) un artefacto explosivo colocado supuestamente por ETA en una central de distribución eléctrica en la carretera que une esta localidad con Aratorés, a 25 metros de la carretera que las une. El artefacto, que ya había explosionado, tenía muy poca carga y sólo dañó levemente el muro de la torreta.

Ésta es la tercera bomba que ETA colocaba en Aragón antes de Reyes, junto con las del Parador de Sos del Rey Católico, que estallaron el jueves. El viernes, una persona que dijo hablar en nombre de la banda anunció a la DYA de San Sebastián que había una tercera bomba en la zona de Aratorés y Boaru. Eran las seis y media, y rápidamente se desplegó un dispositivo, que obligó a cortar la N-330 para acordonar un amplio perímetro, ya que no se dieron datos sobre el lugar en el que estaba situada. Todo indica que fue colocada el mismo día y por las mismas personas que actuaron en Sos, y que pudo haber explotado en la noche entre el jueves y el viernes, porque en la madrugada del sábado nevó y el artefacto estaba cubierto cuando fue localizado.

La bomba, de escasa potencia, fue hallada en un paraje agreste. Ningún vecino de las dos localidades, que apenas suman un centenar de habitantes, notó nada.