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Jáuregui advierte a la coalición

"Si los gestos de Bildu con los presos de ETA no van acompañados del rechazo a la violencia, su mensaje y su discurso serán incompatibles con la democracia, y Bildu sabe muy bien cuáles son las consecuencias de eso". Esa es la respuesta del ministro de la Presidencia al diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, que, en la celebración cívico-religiosa del día de san Ignacio de Loyola, el pasado 1 de agosto, pidió "la inmediata derogación de la doctrina Parot, que es la cadena perpetua, el fin de la dispersión, la puesta en libertad de los presos que están enfermos y de aquellos que estén en condiciones de alcanzar la libertad condicional".

Al día siguiente, el diputado general se negó a abordar el problema de las víctimas de ETA porque, dijo, "no es el momento. Todavía estamos saliendo de ese conflicto", añadió.

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Jáuregui insistió ayer en que si Bildu mostrara "cualquier atisbo de juego con la violencia", estaría "automáticamente sometida a la lupa de la revisión de su legalización", informa Europa Press. El ministro recordó que la ley de partidos permite a la Abogacía del Estado y a la fiscalía "cuestionar la legalidad" de la coalición soberanista.

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