Garzón procesa a Sáenz de Ynestrillas y Duce por el asesinato de Muguruza

El juez Baltasar Garzón acordó ayer los procesamientos del ultraderechista Ricardo Sáenz de Ynestrillas y del policía nacional Ángel Duce como autores del atentado contra los parlamentarios de Herri Batasuna el 20 de noviembre de 1989 en el hotel Alcalá de Madrid, y en el que resultó muerto el diputado Josu Muguruza y gravemente herido el también diputado Iñaki Esnaola. Según el auto de procesamiento, Duce e Ynestrillas formaron un grupo terrorista con el que colaboraron los otros tres procesados, Yolanda González, José Hernández Bartolomé y Antonio López.

La resolución del magistrado ha sido más dura que la petición formulada por el fiscal hace unos días. Garzón ha incluido el delito de contrabando, no solicitado por el fiscal, y además ha considerado que Yolanda González y José Hernández Bartolomé son autores de pertenencia a banda terrorista y no de colaboración con la misma.El magistrado estima que Duce es autor de 23 delitos: pertenencia a banda armada, un asesinato consumado, dos asesinatos frustrados, tres tentativas de asesinato, cinco de terrorismo, otros cinco de estragos, robo con intimidación, depósito de armas, tenencia de explosivos, contrabando y dos delitos de sustitución de placas de matrícula. Ynestrillas ha sido procesado por 20 delitos, tres menos que Duce, uno de terrorismo, otro de estragos y el de contrabando. En el caso de ser condenados por todos los delitos citados, las Penas que les corresponderían superarían de largo los 100 años de cárcel.

José Hernández Bartolomé, policía y armero de la comisaría de Chamberi y Yolanda González Belmonte han sido procesados también por pertenencia a la banda terrorista, un delito de terrorismo, otro de estragos y omisión del deber de denunciar. El armero además está procesado por tentativa de asesinato y depósito de armas.

El joyero Antonio López ha sido procesado por colaboración con banda armada, depósito de armas, tenencia de explosivos y contrabando.

En el auto se fija para Duce e Ynestrillas una fianza de 30 millones para hacer frente a las responsabilidades pecuniarias que pudieran declararse en el juicio. También se han fijado fianzas de dos millones para Yolanda González y Hernández Bartolomé, y de 500.000 pesetas para López. Según el auto de procesamiento, "al inicio de 1989, el policía Ángel Duce, motivado por la actividad terrorista de ETA militar, y ante lo que para él constituía una falta de reaccion adecuada por parte de las instituciones del Estado, propuso a Ynestrillas, que participaba de sus mismas inquietudes, la formación de un grupo de acción violenta que tendría por mision servir de contrapeso a aquella actividad criminal".

Chapuzas

La banda, según el escrito, se llamó Grupo Antiterrorista Español (GANE) y gozaba de una estructura básica y elemental, en la que actuaban los dos fundadores, sirviéndose de forma ocasional de los otros tres acusados.El relato de los hechos detalla minuciosamente la participación de los ahora procesados en varios atentados y transmite la idea de ineficacia de los miembros del grupo. Así, fueron a poner una bomba contra el ayuntamiento de Echarri Aranaz (Navarra) de mayoría abertzale, y la explosión afectó a una vivienda, a una Iglesia, a un club de ancianos y a un colegio de monjas, pero no al edificio municipal. Intentaron atentar contra el ayuntamiento de Goizueta (Navarra) también con mayoría de Herri Batasuna, y, por confusión, resultaron dañadas una carnicería y una sociedad cultural. Lanzaron un explosivo a las 2,20 de la madrugada contra la fachada del cine Montera, de Madrid, donde iba a celebrarse un mitin de HB, y lesionaron al portero nocturno. Trataron en dos ocasiones de atentar con artefactos explosivos contra el abogado Fernando Salas, que ejerce la acción popular en los procesos contra los GAL, y fallaron en ambas ocasiones. Intentaron ametrallar el furgón que trasladaba a juicio a los miembros del comando Madrid de ETA y tuvieron que desistir al no consiguir localizar el vehículo.

En el atentado del hotel Alcalá dispararon a matar contra Esnaola y Jon Idígoras y sólo hirieron al primero y mataron a Muguruza, que, en principio, no era su objetivo.

Mayor eficacia mostraron en otras acciones. Duce e Ynestrillas, después del crimen de Muguruza, atentaron contra el bar Labatai de Deba (Guipúzcoa), propiedad del padre de la parlamentaria de HB Itziar Aizpurua, testigo del ataque del hotel Alcalá el 20 de noviembre de 1989. Para ello viajaron al País Vasco en el Peugeot 309 propiedad de la madre de Ynestrillas, que conduce habitualmente Ricardo. La bomba provocó importantes desperfectos.