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Medio millón de personas vive en la pobreza en Galicia

Cáritas Interparroquial de Santiago denuncia un "núcleo duro" de 100.000 personas en exclusión social

En la Comunidad gallega existe "un núcleo duro" de más de 100.000 personas excluidas socialmente y el número de gente que vive con unos ingresos por debajo de la mitad de la media, indicador de pobreza, llega casi el medio millón, según las estimaciones de Cáritas Interparroquial de Santiago. La población de la comunidad es de 2.772.533 personas, según el último censo de 2007.

Esta entidad presentó la XV Xornada de Solidariedade cos Parados, que se celebrará mañana en la capital de Galicia con la tradicional 'Concentración-Recital de Solidaridad' a las 20.00 horas en la Praza do Toural, con la actuación del cantautor madrileño Rafa Sánchez.

El responsable de Empleo de Cáritas de Santiago, Miguel Fernández, también se refirió al documento 'Unha análise da Precariedade Laboral. Alternativas e Propostas' y denunció que la precariedad "afecta a toda la sociedad", pero "de manera especial" a ciertos colectivos, entre los que incluyó a los inmigrantes y a las mujeres, pues éstas son las depositarias "de casi el 70 por ciento de los contratos a tiempo parcial".

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Para esta institución, el salario mínimo interprofesional, referencia para fijar muchas otras prestaciones e indicadores, "debe aumentar de los 600 euros mensuales actuales hasta los 850 o 900". Además, insiste en la conveniencia de fijar una "renta básica de ciudadanía", que considera "una alternativa muy eficaz para mejorar el modelo de bienestar social y rompería una buena parte de la economía sumergida".

Además, reclama un cambio en el Régimen Especial de las Empleadas del Hogar para que tengan los mismos derechos que el resto de trabajadores y puedan contar "con unas retribuciones mínimas y dignas". Miguel Fernández criticó que haya inmigrantes "internas" en una casa por 500 euros al mes.

Explotación laboral

En este sentido, la directora de Cáritas Interparrroquial de Santiago, Amelia Pereira, denunció "casos de explotación" de personas de otros países en la capital de Galicia y demandó la implicación de toda la sociedad para evitar que se produzcan actuaciones de este tipo. Por ello, otra de las peticiones de este organismo es un cambio en la Ley de Extranjería para que no se den situaciones de irregularidad administrativa y de explotación laboral derivadas de la misma.

En 2007 esta institución atendió 490 nuevas personas, un 75 por ciento de ellas inmigrantes o emigrantes retornados y gestionó 410 ofertas de trabajo directas, sobre todo de empleo doméstico y ayuda a domicilio, limpieza, hostelería, construcción, almacén y conductores, con 203 colocaciones.

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