Montilla alerta a Zapatero de que le dará "problemas" por la financiación

La publicación de las balanzas fiscales ha abierto una nueva brecha entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña. Ahora el debate se centra en hasta qué punto la diferencia entre lo que aporta cada comunidad y lo que recibe debe tenerse en cuenta para negociar la nueva financiación autonómica. El presidente de la Generalitat, José Montilla, alertó ayer a José Luis Rodríguez Zapatero de que la negociación deberá "tener en cuenta" el resultado de las balanzas y prometió librar una dura batalla por ello. "A Zapatero le he creado problemas y algunos más le crearé", dijo el presidente de la Generalitat.

En el Gobierno catalán han caído especialmente mal las reflexiones del secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, defendiendo que las balanzas fiscales han demostrado que el sistema de financiación es válido en su conjunto.

"De las balanzas fiscales no se puede deducir la financiación, pero es obvio que otorga una información que se ha de tener en cuenta para negociar la financiación", abundó Montilla ayer en el Parlamento catalán.

La capacidad del presidente de la Generalitat para lograr un buen sistema de financiación para Cataluña está siendo seriamente cuestionada por Convergència i Unió. Los nacionalistas de Artur Mas acusan a los socialistas catalanes de no ser capaces de arrancar compromisos serios al Gobierno y de carecer de capacidad de influencia sobre él pese a tener 25 diputados en el Congreso. De ahí que la respuesta de Montilla a Mas, ayer en la sesión de control al Gobierno, fuera todo un órdago hacia Zapatero.

El hecho de que no trabaje en contra de José Luis Rodríguez Zapatero, dijo Montilla, "no quiere decir que no esté dispuesto a crearle problemas, porque algunos le he creado y algunos más le crearé".