Montilla exige a sus consejeros un recorte drástico del gasto en informes

Mayor austeridad y más precauciones antes de encargar informes de asesoramiento externo. El presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, se ha propuesto poner freno al gasto en estudios de su Gobierno, que el año pasado alcanzó los 32 millones de euros y que en algunos casos se han gastado en informes de dudosa utilidad. El primer paso ha sido dar un toque de atención a sus consejeros para que reduzcan drásticamente el encargo de informes no imprescindibles. El presidente lo expuso en la reunión del Gobierno del pasado martes y en la ejecutiva del Partit dels Socialistes del pasado lunes, a la que también asistieron varios de sus consejeros.

El presidente fue escueto en sus palabras, pero los consejeros se dieron por enterados. "Austeridad", pidió Montilla tras haber trascendido que algunos de sus consejeros han pagado informes de asesoramiento antes de haberlos recibido o que algunos de estos textos fueron redactados, y debidamente cobrados, por ex altos cargos de la administración catalana o de los partidos que apoyan al Gobierno. El año pasado se encargaron, en total, 1.580 informes, la mayor parte de los cuales se mantienen ocultos a la opinión pública, pues el Gobierno todavía no los ha entregado al Parlamento. Muchos de ellos han sido solicitados por la oposición.

Fuentes del Gobierno aseguran que Montilla no ha precisado las dimensiones del recorte que pretende instaurar en el gasto, pero sí ha anunciado a sus colaboradores que éste será drástico en los informes que no sean imprescindibles. El presidente distingue tres niveles de importancia en los estudios a encargar: los informes técnicos relativos a obras, que no se recortarán; los informes sectoriales de los diferentes consejeros, y los estudios de asesoramiento sobre actividades no directamente vinculadas a la gestión del día a día.

Este tercer grupo es el que se verá más reducido. Montilla justifica mantener el segundo grupo porque en algunos casos, bajo estudios con títulos chocantes, como uno de Agricultura sobre el murciélago nana, hay trabajos para reducir plagas que afectan los cultivos de determinadas zonas de Cataluña. En estos casos, Montilla pide que el Gobierno se explique mejor para no dar pie a malas interpretaciones.

Pero el presidente de la Generalitat admite que en algunos casos se ha llegado demasiado lejos. En las últimas semanas ha trascendido que el departamento de Salud pagó el año pasado dos informes por valor de 40.000 euros mucho antes de que estuvieran terminados y entregados. El departamento de Interior y Relaciones Institucionales gastó 15.000 euros en un informe sobre el papel de China en la seguridad de Asia. Además, el conjunto del Gobierno gastó 1,4 millones en estudios de asesoría de imagen y se tomó como práctica habitual, la rebaja de los importes de los contratos para evitar el concurso público.