_
_
_
_
_

El PP agita contra el Gobierno el conflicto fronterizo en Melilla

González Pons viaja a la ciudad "para estar cerca de la policía y los melillenses"

Mónica Ceberio Belaza

El PP está decidido a plantear el conflicto de Melilla como una grave crisis a una semana de la visita a Marruecos del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que se reunirá con su homólogo marroquí, Taieb Cherkaoui, el 23 de agosto. Su vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, viajó ayer a la ciudad autónoma para reunirse con el presidente de la misma, Juan José Imbroda (PP) -que lleva días atacando al Gobierno -, y "para estar cerca de la policía y de los melillenses", según declaró ayer.

González Pons criticó hace días al Ejecutivo por "usar" al Rey como su "ministro de Exteriores", tras la llamada de don Juan Carlos a Mohamed VI para suavizar la relación bilateral. Por su parte, Gustavo de Aristegui, portavoz popular en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, cuestionó más el papel español que el marroquí en esta crisis: si la política de Rabat "no es responsable", el "silencio" español es aún "más irresponsable".

Igualdad considera que las burlas a las mujeres policía son cuestión de Interior
Más información
Los líderes de la protesta quieren llevarla a Ceuta
Los activistas mantienen su amenaza de boicoteo a la ciudad para mañana
El PP habla de "máxima tensión" en Melilla
Los mercados de Melilla desabastecidos por el boicot marroquí

Dice el PP que Marruecos pretende presionar al "debilitado" Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "para sacar algo", aunque no ha mencionado qué. El conflicto está aparentemente aletargado por el lado oficial marroquí que, aunque permite que su policía asista impávida al boicot en la frontera, no ha vuelto a pronunciarse sobre la cuestión tras su última queja del 9 de agosto. Además, la agencia oficial de noticias solo da cuenta ya de la próxima visita de Rubalcaba.

Por otro lado, el Gobierno de Melilla ha pedido por boca de su vicepresidente segundo, Abdelmalik El Barkani, que Rubalcaba visite la ciudad autónoma antes de reunirse con el ministro del Interior de Marruecos para atender las reivindicaciones de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, cuyos sindicatos y asociaciones han pedido al Ejecutivo "firmeza" en la defensa de los agentes en la frontera tras los incidentes y burlas a las mujeres policía por parte de los activistas marroquíes.

El Ministerio de Igualdad se pronunció ayer: "Queremos expresar nuestro total apoyo a las agentes", señaló la secretaria de Políticas de Igualdad, Isabel Martínez, que remitió a la cita de Rubalcaba y su homólogo.

Mientras, la Delegación del Gobierno intenta evitar problemas en la frontera. Un grupo de melillenses se citaron ayer por Facebook para entrar a la zona de seguridad fronteriza conocida como "tierra de nadie", quitar los carteles de los marroquíes y colocar la bandera española. Cuando los medios de comunicación esperaban, sobre las diez de la noche, a que llegaran, la policía española les informó de que no se podía pasar.

El grupo -formado por cinco personas- no llegó a intentar cruzar a la tierra de nadie pero uno de ellos expresó su queja por no poder acceder a ese espacio neutral para expresarse igual que lo hacían los marroquíes.

Esteban González Pons (a la izquierda), junto al presidente de Melilla , Juan José Imbroda, y el líder de la Asociación Religiosa Musulmana Sidi Dris Abdelkader, durante el acto de ruptura del ayuno de Ramadán organizado ayer por la ciudad autónoma.
Esteban González Pons (a la izquierda), junto al presidente de Melilla , Juan José Imbroda, y el líder de la Asociación Religiosa Musulmana Sidi Dris Abdelkader, durante el acto de ruptura del ayuno de Ramadán organizado ayer por la ciudad autónoma.ÁNGELA RÍOS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Mónica Ceberio Belaza
Reportera y coordinadora de proyectos especiales. Ex directora adjunta de EL PAÍS. Especializada en temas sociales, contó en exclusiva los encuentros entre presos de ETA y sus víctimas. Premio Ortega y Gasset 2014 por 'En la calle, una historia de desahucios' y del Ministerio de Igualdad en 2009 por la serie sobre trata ‘La esclavitud invisible’.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_