El Parlamento catalán debatirá una ley para proclamar la independencia

El Parlamento catalán vivirá en una semana un debate sin precedentes: la toma en consideración de una ley para proclamar la independencia de Cataluña. La norma la presenta Solidaritat Catalana per la Independència, que solo tiene cuatro diputados. La Mesa del Parlamento, en la que CiU tiene mayoría, aceptó ayer que se debatiera en el próximo pleno, donde se tratarán las enmiendas de los grupos contrarios a la secesión: PSC, PP y Ciutadans.

La ley marca los pasos que Cataluña debe seguir hasta proclamar la independencia: faculta a la Generalitat para que negocie su estatus internacional; establece una asamblea de representantes que trabajará para declarar la soberanía; y culmina el proceso en una proclamación solemne de la independencia.

Pese a la permisividad que CiU ha exhibido hasta ahora con esta ley, sus escarceos con el soberanismo acabarán cuando se debata en el pleno. Los nacionalistas no apoyarán la norma, por lo que los votos de PSC, PP y Ciutadans bastarán para tumbar holgadamente el proyecto secesionista. CiU intentará evitar que se vote la ley presionando a Solidaritat para que retire su propuesta, algo a lo que los independentistas no están dispuestos. Oficialmente, CiU dice que quiere evitar la imagen de una abultada derrota del soberanismo. Los nacionalistas exigen la retirada de la ley porque prefieren no mojarse en el momento de la verdad, en la Cámara.

Las contradicciones de Convergència son claras con la independencia: en la calle sí, en el Parlamento, no. Da buena muestra de ello el presidente de la Generalitat, Artur Mas, que votó en secreto la semana pasada en la consulta popular soberanista de Barcelona pero ayer negó su apoyo a la independencia. Hasta Josep Antoni Duran Lleida, líder de Unió, denunció esta paradoja y exigió seriedad a Convergència.

La reunión ater entre los portavoces de los grupos parlamentarios para pautar el orden del día del pleno fue movida. La ley para proclamar la independencia encendió los ánimos. Según fuentes presentes en la reunión, Miquel Iceta, portavoz socialista, preguntó qué medidas debía tomar el Parlamento ante una posible declaración de independencia. El portavoz de CiU, Jordi Turull, se lo tomó mal y respondió con vehemencia: "Si hombre, ¡Enviamos a los tanques de la Chacón!". Iceta reprendió a Turull y, con sorna, pidió perdón por haberse tomado en serio la cuestión independentista.