El Parlamento votará el envío al extranjero de la Guardia Civil

El envío de guardias civiles a operaciones en el exterior deberá ser aprobado por el Congreso, igual que sucede con las Fuerzas Armadas. Así lo dispone el borrador del real decreto sobre misiones de carácter militar que pueden encomendarse a la Guardia Civil, que amplía al instituto armado el mecanismo de consulta y aprobación parlamentaria previsto en la Ley Orgánica de la Defensa Nacional de 2005 para los militares. Aunque el Gobierno sometió, en febrero pasado, a votación del Congreso el envío de 40 agentes a Afganistán -junto a otros 511 militares- no ha sido esa la norma general.

El decreto señala que las misiones militares que podrá asumir la Guardia Civil, de forma individual o integrada en estructuras de las Fuerzas Armadas españolas o de una organización multinacional, son las de policía militar, vigilancia y defensa militares y otras que se le atribuyan.

Las misiones militares le serán encomendadas a la Guardia Civil "por el ministro de Defensa, previa consulta con el ministro del Interior", mientras que la generación del contingente "será acordado conjuntamente por los Ministerios de Defensa e Interior". En el cumplimiento de sus misiones militares, "la Guardia Civil dependerá del ministro de Defensa". Cuando dichas misiones tengan carácter operativo, estará a las órdenes del jefe del Estado Mayor de la Defensa, aunque conservará siempre su dependencia orgánica del director general de la Guardia Civil.

En el cumplimiento de sus misiones militares, los guardias civiles estarán sujetos a las normas penales, disciplinarias y al régimen de derechos y deberes de los miembros de las Fuerzas Armadas.