Prisión para el terrorista que atentó contra la Ertzaintza

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ordenó ayer el ingreso en prisión del presunto etarra Manex Castro Zabaleta, acusado de la colocación de dos bombas trampa contra la Ertzaintza en Hernani (Guipúzcoa) el 16 de enero y de participar en el atentado contra la sede del PSOE en Lazkao (Guipúzcoa) el 23 de febrero. El fiscal Miguel Ángel Carballo imputa al presunto miembro legal (no fichado) de ETA los delitos de pertenencia e integración terrorista, estragos, asesinato terrorista en grado de tentativa y tenencia de explosivos.

Castro Zabaleta, de 24 años, permaneció en el despacho del magistrado apenas unos 10 minutos, ya que se negó a declarar. La policía adelantó el arresto del supuesto terrorista, al que se le incautaron materiales para la fabricación de explosivos, al sospechar que podía intentar cometer otro atentado. En esa operación, la Ertzaintza arrestó el martes a Mikel Garmendia por su supuesta relación con la colocación de las bombas de Hernani. Pese a todo, un liberado (a sueldo) del comando y los presuntos legales Beñat Aginalgalde Garmendia y Ugaitz Errazkin Telleria han logrado huir. Y ayer fue detenido en Hernani Iraitz Santa Cruz, que podría estar relacionado con el vehículo que utilizó el comando que asesinó el 3 de diciembre en Azpeitia al empresario Ignacio Uría.