El 'Proyecto Madrid Centro' apuesta por limitar el tráfico rodado en el centro de Madrid
El libro blanco sobre el futuro urbanístico encargado por el Ayuntamiento propone una ciudad verde por medio de corredores ecológicos
No es (aún) un plan de obras exactamente, sino un plan de ideas. Un documento que definirá el futuro de Madrid. Unos 50 expertos de todas las áreas (Urbanismo, Arquitectura, Economía, Sociología...), junto a diversos departamentos del Ayuntamiento de Madrid, han participado durante tres años en la elaboración de lo que se ha denominado Proyecto Madrid Centro, una agenda de actuaciones que servirán de base para la revisión del próximo Plan General de Ordenación Urbana, el que sustituirá al de 1997.
Este gran proyecto o libro blanco abarca un espacio concreto de la capital: el denominado la almendra de Madrid, el delimitado por la Calle 30 en el este, sur y oeste, y por el eje de Silesio Delgado y la calle Mateo Inurria en el norte, es decir, el territorio fundamental que conformó el Madrid construido en la década de los años 50. Entre otros distritos abarca Salamanca, Retiro, Centro, Chamberí, Chamartín, Arganzuela y parte de Moncloa-Aravaca. Total, 51 kilómetros cuadrados.
Entre otros cambios, algunos audaces incluso hasta utópicos, que plantea este proyecto estratégico es una clara apuesta por limitar el tráfico rodado en las calles de Madrid y ganar espacio para los ciudadanos. Eso se conseguiría "especializando algunas de las calles de la ciudad", ha explicado esta mañana durante la presentación de las conclusiones del proyecto José María Ezquiaga, urbanista directo del proyecto. "Es decir", ha explicado, "delimitando algunas para el tráfico y otras limitándolas a los residentes". De esta forma, el tráfico de paso "se organizaría en las zonas perimetrales y las calles interiores serían para los residentes". Se trataría de invertir unas cifras que ahora agobian a unos y otros: el 60% del espacio público de Madrid está siendo utilizado por los automóviles y solo un 30-35% para el peatón.
Buscar el verde para Madrid es otra de las buenas intenciones que plantea este proyecto, que ya se ha iniciado con el plan Madrid Río, creando corredores verdes que se unirían con macrozonas verdes en las calles de la ciudad. Esto en cuanto a ideas que se pueden materializar. Hay otras propuestas que entran en una zona más intangible, como mejorar la imagen nacional e internacional del centro; garantizar el progreso económico, fortalecer la centralidad institucional y cultural como un activo del centro de Madrid o crear espacios para la creatividad y la innovación.
"Hemos abierto una reflexión para que podamos adoptar en su día esas decisiones en el ámbito de nuestra responsabilidad", ha subrayado el alcalde de Madrid Alberto Ruiz Gallardón. "Este documento implica el trabajo más importante de la próxima legislatura: el diseño definitivo de la ciudad a través de un Plan General. Es una tarea que empieza hoy, pero no acabará nunca", ha vaticinado el alcalde. Porque una ciudad, ha dicho, "no se acaba jamás".