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Rubalcaba asegura que la obligación de la Guardia Civil es multar si hay infracción

La DGT niega que en junio se hayan formulado 120.000 denuncias de tráfico menos por la 'huelga de bolis caídos'

La obligación de la Guardia Civil es cumplir la ley. Y poner multas entra dentro de la ley. Así lo ha afirmado hoy el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha negado el fin recaudatorio del nuevo sistema para evaluar a los agentes de tráfico, que les recompensará con dos puntos por cada denuncia por seguridad vial y con cuatro por multar infracciones en transporte de viajeros o mercancías. El objetivo es, según el titular de Interior, garantizar la seguridad vial.

Rubalcaba ha insistido en la obligación de "cumplir las leyes" y no ha querido entrar en la polémica del nuevo baremo por puntos para evaluar a los agentes de tráfico, difundido en una nota interna de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Según el documento, el auxilio en carretera valdrá un solo punto y la intervención en un accidente, dos, lo mismo que una multa por seguridad vial. El valor que se asigna a las actividades de los agentes depende de la "penosidad" y la "ocupación de tiempo" de su realización y de "la iniciativa en implicarse". Las denuncias por delitos contra la seguridad vial demuestran, según la nota interna, "un plus de iniciativa" y un "mayor estudio para estar al día".

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El portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), José Antonio Aguado, ha considerado que un agente es mucho más que un radar en un punto fijo. "Por encima de la obligación de poner multas, lo más importante es evitar accidentes, dar protección al ciudadano y auxiliarle", ha manifestado el portavoz de la asociación mayoritaria del instituto armado. "Lo que influye en la seguridad vial no son las multas sino que la Guardia Civil esté en los puntos peligrosos y no en los más productivos", ha añadido.

Por su parte, el director de la DGT, Pere Navarro, ha negado que en junio se hayan impuesto 120.000 multas menos que en el mismo mes de 2009 por la supuesta huelga de bolis caídos promovida por los agentes de tráfico para demandar mejoras laborales. "Los datos de la AUGC no coinciden con los datos que tenemos, no en la misma magnitud", ha afirmado el responsable de la Dirección General de Tráfico, que ha preferido no desvelar la cifra que maneja su departamento.

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