_
_
_
_
_

Doce presos españoles en Tailandia regresan mañana para cumplir sus condenas en España

Doce españoles presos en Tailandia regresarán mañana a Madrid en un avión militar que despegó ayer de Barajas con varias decenas de repatriados asiáticos y 23 policías a bordo. Los reclusos, que llevan al menos cuatro años encarcelados, cumplirán el resto de sus condenas por tráfico de drogas en prisiones españolas. De este modo, tras más de un año de arduas gestiones, se cumple por primera vez el acuerdo hispano-tailandés de cumplimiento de sentencias en el país de origen. En las duras prisiones taliandesas permanecen, sin embargo, casi una veintena de españoles, según fuentes diplomáticas.

Más información
Sevillanos, catalanes y madrileños

CHARO NOGUEIRA A las ocho de la mañana de ayer comenzó la fase final de una repatriación sin precedentes. A esa hora llegaban a las instalaciones del ala 45 del Ejército del Aire, en el aeropuerto madrileño de Barajas, dos autobuses del Cuerpo Nacional de Policía. En ellos viajaba un número indeterminado de ciudadanos asiáticos, posiblemente cerca de 50, que iban a ser deportados por hallarse ilegalmente en España.Los deportados, junto con tres inspectores de policía -uno de ellos, de Interpol- y veinte agentes, subieron al avión una hora después, cuando la niebla comenzaba a adueñarse de las pistas. La aeronave, tripulada por trece militares, despegó a las 10 de la mañana del aeropuerto madrileño.

Comenzaba un largo viaje -dieciocho horas, según el plan de vuelo- con escalas en Karachi (Pakistán) y Nueva Delhi (India) para desembarcar a los deportados asiáticos. Ninguno de ellos es tailandés. El destino final del avión era Bangkok, capital de Tailandia, donde se esperaba su llegada a las nueve de la mañana de hoy viernes -tres de esta madrugada, hora española-, tal como confirmó a EL PAÍS el embajador en Tailandia, Tomás Chávarri. El aterrizaje en Madrid está previsto para el sábado por la tarde.

Un indultado

El diplomático tenía previsto hacerse cargo de los doce presos españoles -diez hombres y dos mujeres- que iban a ser entregados oficialmente en la sede de la dirección de la policía el viernes por la mañana. "Permanecerán menos de 24 horas allí. El avión despegará de Bangkok el sábado a las nueve de la mañana [hora local]", aseguró el embajador Chávarri. A la docena de reclusos, que pasará a disposición de la Audiencia Nacional, se sumará otro español, Juan Palau Tamayo, recién liberado al recibir -el viernes pasado- el indulto real que anuló su condena por tenencia de quince gramos de heroína.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El Ministerio de Justicia, que silenció la operación hasta mediodía de ayer, facilitó los nombres de los presos repatriados: Juan Ferré Navarro, Ildefonso García García, Teresa Esteves Armengol, José Luis Voltez Espríu, Jacinto Portadella Lope, Estrella Priego Martínez, Antonio Vega Holguín, Isidro Gasco Montoro, José Gutiérrez Camardiel, Cristóbal Pérez Arispón, Mariano Ramos Fernández y Francisco Rodríguez Ramos. El Ministerio incluyó entre los presos al recién indultado. Según Justicia, "permanecen aún otros cuatro españoles en prisiones tailandesas".

Sin embargo, el embajador Chávarri aseguró que quedan entre quince y veinte, todos en Bangkok. Cinco de ellos, condenados a cadena perpetua, se encuentran en la prisión de alta seguridad. Entre ellos figura el miembro del GAL Ismael Miquel Gutiérrez. El preso Agustín López Meroño, con pena de muerte, está pendiente de apelar la condena por tercera vez.

Según Justicia, prácticamente todos los repatriados fueron sentenciados a muerte en el primer momento. La pena fue conmutada por cincuenta años de prisión y luego rebajada a la mitad. El embajador Chávarri aseguró que todos ellos han cumplido, como mínimo, cuatro años de condena en prisiones tailandesas.

La repatriación ha sido posible al aplicarse, por primera vez, el Convenio de Cooperación entre España y Tailandia, suscrito en Bangkok el 7 de diciembre de 1983 y ratificado en 1987. Este acuerdo establece el cumplimiento de las sentencias en los países de origen.

"Trámites engorrosos"

Los ministerios de Justicia, Asuntos Exteriores, Defensa e Interior han trabajado en la repatriación. La Embajada española en Bangkok ha desempeñado un papel notable. "Ha sido un trabajo arduo, con trámites muy lentos y engorrosos, pero estamos satisfechos", asegura Tomás Chávarri. Los expedientes empezaron a presentarse en noviembre de 1990. A finales de agosto de 1991 se obtuvo la conformidad de las autoridades tailandesas. En octubre pasado, el Consejo de Ministros español dio el preceptivo visto bueno.

Los presos españoles reciben, cada quince días, la visita de un diplomático que les lleva alimentos, medicinas y ropa. "Nos hemos volcado con ellos, aunque es muy difícil contentar a todos. Viven una situación durísima y necesitan apoyo moral", afirma. el embajador Chávarri.

El diplomático cree que, a pesar de la repatriación, la tarea está lejos de acabar. "Ha habido dos nuevos españoles arrestados por narcotráfico y aún no han ido a juicio", explica. "Por desgracia, este problema no desaparecerá nunca", opina el embajador.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_