El Gobierno pide que se active ya el nombramiento de nuevos magistrados del TC
El PSOE desbloqueará el procedimiento en los próximos días. - Montilla pide en el Senado "respeto" por el Estatuto catalán
Por primera vez desde que PSOE y PP dejaron de hablar del asunto, a principios de 2009, el Gobierno ha mostrado su interés por la renovación cuanto antes de los cuatro magistrados del Tribunal Constitucional que permanecen en funciones. Durante su intervención en la Comisión general de Comunidades Autónomas del Senado, el vicepresidente de política Territorial, Manuel Chaves, ha indicado que "la posición del Gobierno es que se inicie lo antes posible el proceso de renovación, de manera que se convoque lo antes posible la Comisión de Nombramientos en el Senado".
Fuentes de la dirección socialista presentes en la Comisión confirmaron el PSOE va a pedir formalmente que se desbloquee el proceso de nombramientos. El presidente de Senado, Javier Rojo, congeló todo el procedimiento a finales de 2009 porque, en su opinión, no debía llevarse a cabo sin acuerdo previo de los dos grandes partidos sobre los cuatro nombres para sustituir a los cuatro magistrados que actúan con el mandato prorrogado desde diciembre de 2007.
En el debate se pueden utilizar, con traducción, todas las lenguas oficiales
El proceso de nombramiento se paró cuando el Senado había recibido 23 propuestas de las comunidades autónomas para esos puestos. Formalmente, sólo debe convocarse la Comisión de Nombramientos para elegir a cuatro. El PP exige que dos de ellos sean Francisco Hernando y Enrique López, dos juristas muy significados contra el Gobierno de Zapatero que el PSOE rechaza. Sin embargo, no hay alternativas para negociar, pues el PP no ha propuesto a nadie más.
Dirigentes de ese partido han reconocido públicamente su interés en bloquear la renovación, pues, de acuerdo con las nuevas mayorías parlamentarias surgidas de las urnas en 2004 y 2008, las mayorías cambiarían a favor del sector progresista.
La actitud anunciada hoy supone una novedad importante en el discurso del PSOE hasta ahora, que sólo esperaba que el PP no pudiera rsistir al presión y retirara a sus candidatos. Ante la evidencia del fracaso de las estrategia, y la incapacidad del Constitucional de alcanzar una sentencia por mayoría sobre el Estatuto de Cataluña, el PSOE pedirá ahora que se convoque esa comisión. Según fuentes de la dirección socialista, aún no hay confirmación del que el PP quiera participar en el proceso. Si no lo hace, la renovación es imposible.
Respeto por el Estatuto
El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha pedido hoy en el Senado "respeto" por la voluntad del pueblo de Cataluña expresada en su Estatuto de autonomía pendiente de sentencia del Tribunal Constitucional. En una interención ante la comisión general de Comunidades Autónomas. Montilla ha pedido la renovación del Tribunal Constitucional, cuatro de cuyos miembros han finalizado su mandato, para evitar la "deslegitimación" de este organismo.
"Está en riesgo el sentido propio del pacto constitucional", ha dicho Montilla tras reprochar de nuevo al Partido Popular que presentara un recurso de inconstitucionalidad contra una ley refrendada por los catalanes en 2006 y que, en su opinión, se ha desarrollado desde entonces sin mayores problemas. "España no se ha agrietado por ninguna parte", ha asegurado Montilla.
También ha criticado al PP por la total ausencia de presidentes autonómicos de este partido a una comisión a la que sí han asistido varios presidentes socialistas. "Hablar de Cataluña es hablar de España; siento que hoy no estén aquí aquellos que siempre tienen la palabra España en la boca", ha dicho.
El objetivo de la comparecencia de Montilla era pedir la reactivación del proceso de renovación de los cuatro magistrados del Tribunal Constitucional designados por el Senado cuyo mandato caducó en 2007. "El Tribunal Constitucional está en un laberinto y puede arrastrar hacia él al conjunto de España", ha advertido el presidente de la Generalitat. "Hay que ayudar al TC a salir del laberinto", ha concluido antes de advertir de nuevo de que "está en riesgo el pacto constitucional".
La advertencia
Montilla ha resaltado que "está en juego no sólo el prestigio de las instituciones sino también el sentido del pacto constitucional, sobre todo si ese pacto que se renovaba con el Estatuto de 2006 queda deslegitimado". El aviso seguía: "Lo que está en juego es que la desafección pueda dar alas a quien quiera la ruptura".
También ha habido una advertencia personal: "Como presidente de la Generalitat asumo la defensa del Estatuto. No quiero ir un centímetro más allá de la Constitución pero tampoco quedarme un centímetro corto".
El Gobierno central estará representado por el vicepresidente de Política Territorial, Manuel Chaves, que podrá intervenir cuando quiera, todas las veces y el tiempo que quiera.
Tras la réplica de Montilla, se abre un turno de palabra para todos los senadores designados por las comunidades que lo soliciten. A la espera de que termine el plazo, sólo lo ha pedido Xosé Manuel Pérez Bouza (BNG).
Hay una última ronda de palabra para los grupos parlamentarios. El portavoz del PP en la Comisión, el turolense Manuel Blasco, ha cedido su turno a la líder del partido en Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, que tendrá así una oportunidad única de replicar a Montilla cara a cara. Sánchez-Camacho dispondrá de la oportunidad de intervenir en catalán, ya que la Comisión de Comunidades Autónomas es el único foro parlamentario de España donde se pueden hablar todas las lenguas oficiales, con un servicio de traducción simultánea. Esto es así desde 2005, por acuerdo unánime de los grupos parlamentarios, pero ha cobrado gran notoriedad tras una propuesta, actualmente en tramitación, para que se haga extensivo a todas las sesiones del Senado.
Cuatro lenguas
El presidente de la Generalitat ha aprovechado su discurso en el Senado para romper una lanza en favor del plurilingüismo. Montilla ha llamado "al respeto por las lenguas cooficiales, quedeben ser respetadas por las instituciones y entendidas por la sociedad española".
Montilla ha hablado en catalán, castellano, gallego y euskera yha lamentado que se ponga como excusa el coste de la traducción para frenar la normalización lingüística en instituciones como las Cortes.
