Zapatero acusa a Aznar de haber situado a España en la lista del terrorismo internacional

Sin mencionar al presidente del Gobierno, José María Aznar, pero en clara referencia a él, el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, dio por sentado ayer que España "lamentablemente" ya está "en la lista de objetivos del terrorismo internacional" debido al apoyo del Gobierno de este país a la guerra contra Irak. Zapatero afirmó que el terrorismo internacional no se combate "con guerras ilegítimas", y sentenció que "la peor arma de destrucción masiva es el fanatismo; y hay guerras", advirtió, "que lo fomentan". Esta misma semana, el Grupo Parlamentario Socialista solicitará en el Congreso que Aznar protagonice un debate urgente sobre el terrorismo internacional y sus consecuencias en España.

El líder socialista pide "un voto preventivo para que nunca más se apoye una guerra preventiva"

"Debemos acudir a Naciones Unidas, que es la garantía del derecho internacional"

Exige al presidente del Gobierno un debate sobre el riesgo de atentados tras la guerra de Irak

Quizá la relación que ve el líder del PSOE entre el apoyo de Aznar a Bush en la guerra de Irak y el atentado terrorista en Casablanca contra la Casa de España sea la acusación más grave que Zapatero haya realizado al Gobierno durante esta campaña electoral. El sábado, al mediodía, poco antes de que Zapatero saliera al estrado a dar un mitin en Sevilla, recibió una llamada telefónica del vicepresidente primero, Mariano Rajoy. Éste le dio los pocos datos que en esos momentos tenía sobre el atentado en Marruecos. Rajoy quedó en que habría una nueva comunicación si había datos de interés. El líder socialista, según su propio relato, se lo agradeció y le remitió para nuevas informaciones en ese día al diputado Alfredo Pérez Rubalcaba. No hubo más llamadas.

Pasaron varias horas desde ese atentado y el líder socialista se decidió a establecer una relación entre el apoyo de Aznar a la guerra de Irak y las posibles consecuencias terroristas para España. Lo hizo en Valladolid, donde exigió a Aznar un debate urgente para corregir la actual política exterior. Aunque como impulsor del Pacto Antiterrorista en España también dejó una puerta abierta al diálogo y al consenso con el Gobierno.

No imaginaban los vallisoletanos y otras gentes de Castilla y León que acudieron a esta ciudad castellana a escuchar a Zapatero que cuando les pidió a ellos "y a todos los ciudadanos" un voto que llamó "preventivo" iba a derivar en la reflexión última sobre la difícil situación que ahora vive España. "No sólo se ha conseguido que Batasuna esté en una lista, sino que España esté en la lista del terrorismo internacional", dijo Zapatero. Se refería a la inclusión por parte de EE UU de Batasuna como organización terrorista, decisión sobre la cual, en su momento, Zapatero se mostró moderadamente satisfecho, toda vez que, a su juicio, Europa, y singularmente Francia, debe seguir siendo el referente en la lucha contra ETA.

"A España no le conviene seguir la estrategia de Bush en la lucha contra el terrorismo, por lo que pido al presidente del Gobierno un debate urgente; le pido que escuche y reflexione. Yo le voy a apoyar en la lucha antiterrorista, aquí y en el mundo, pero al igual que en España se hace con todas las garantías jurídicas también en el terrorismo internacional debemos acudir a Naciones Unidas, que es la garantía del derecho internacional, y no a guerras preventivas".

Éste fue el colofón a una solicitud "a todos los ciudadanos, de cualquier color político", para que den al PSOE, el 25 de mayo y el próximo año, en las elecciones generales, "un voto preventivo para que nunca más se apoye una guerra preventiva".

Antes, Zapatero, que intervenía en su tierra natal, echó por tierra la gestión de Aznar:"No ha escuchado a los ciudadanos que se oponían a una guerra injusta contra Irak, no ha escuchado a los jóvenes en las reformas educativas, tampoco a los agricultores y ganaderos; pero el 25 de mayo escuchará a los ciudadanos, y la mejor forma es votando al PSOE".