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Zapatero advierte que Sortu no será legal hasta que ETA desaparezca

El Gobierno actuará con beligerancia política y judicial contra la marca

Luis R. Aizpeolea

Los intentos de ETA de atentar contra las torres Kio y contra el lehendakari socialista, Patxi López, a primeros del año pasado, hechos conocidos en las últimas horas, han incidido en el discurso político del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre el nuevo partido de la izquierda abertzale, Sortu. Ayer, tras reafirmar la voluntad de su Gobierno de "hacer desaparecer de la vida de este país las siglas de ETA", Zapatero precisó, en una declaración en La Moncloa, que esa voluntad va "más allá de las treguas, de los comunicados y de las posiciones políticas" de la banda y de Sortu. A lo que añadió que "con tregua o sin tregua (de ETA), seguiremos con la guardia muy alta".

"El hecho de que ETA exista, aunque en tregua, es un acto de violencia"
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Zapatero saludó hace un mes, lo mismo que su vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba, el paso dado por Sortu el 7 de febrero, al rechazar en sus estatutos la violencia de ETA. Esta calificación no ha cambiado. Como tampoco que la última decisión la tienen los tribunales. Pero el Gobierno tiene en cuenta, a la vista de los datos arrojados por las últimas detenciones, el pulso entre la izquierda abertzale y ETA y, de modo más preciso, los obstáculos de la banda a un fin de la violencia.

ETA, por ejemplo, preparaba el asesinato de Patxi López mientras las bases de la izquierda abertzale votaban la ponencia Zutik Euskalherria y con ella el rechazo a la violencia; eso sucedía pocas semanas antes de que la izquierda abertzale y varios Premios Nobel de la Paz irlandeses y sudafricanos reclamaran a ETA, en marzo de 2010, a través de una declaración fechada en Bruselas, una tregua permanente, verificable y con voluntad de definitiva.

Para el Ejecutivo, estos hechos confirman que la voluntad de la izquierda abertzale de acabar con la violencia no incide de modo decisivo en ETA. Y le reafirman también en la tesis, manejada por la Abogacía y la Fiscalía del Estado en los informes que ha presentado estos días ante la Sala del 61 del Tribunal Supremo, de que para defender la legalidad de la izquierda abertzale en estos momentos de Sortu es necesaria como condición previa la desaparición de ETA.

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O, dicho de otro modo, que el Gobierno será beligerante contra Sortu mientras ETA no desaparezca o mientras Sortu no rompa de forma inequívoca con ETA y la banda siga ahí. "Es verdad que los estatutos de Sortu son un paso en contra de la violencia. Pero el hecho de que ETA exista, aunque esté en tregua, es un acto de violencia por su capacidad de intimidación. Eso obliga a Sortu a rechazar la misma existencia de ETA y no limitar su rechazo a los atentados que pudiera cometer en el futuro o actuar como si ETA no existiera", según fuentes gubernamentales.

El Gobierno, en definitiva, admite el paso dado por Sortu y está a la espera de lo que decida el Tribunal Supremo sobre si la legaliza o no. Pero, mientras, ha jugado fuerte en su beligerancia con los informes de la Abogacía del Estado contra la legalidad de Sortu porque teme, por la existencia de ETA, que su legalización sea prematura. "No hay garantías de que ETA vaya a desaparecer y, por tanto, existe el riesgo de tener a una izquierda abertzale legalizada, con una actitud no suficientemente contundente con la banda", señalan fuentes gubernamentales.

Zapatero recibe al presidente de Chile, Sebastián Piñera, en La Moncloa.
Zapatero recibe al presidente de Chile, Sebastián Piñera, en La Moncloa.ÁLVARO GARCÍA

Zapatero: "Con tregua o sin tregua, seguimos con la guardia alta"

- "La Policía Nacional y la Guardia Civil han estado con una gran actividad todos estos años, (...) y su resultado es, entre otras cosas, evitar atentados".

- "La detención tiene gran importancia operativa. Conozco desde cuánto tiempo se viene trabajando en la búsqueda del comando, el esfuerzo hecho, y esto pone de manifiesto que la superioridad del Estado de derecho ante ETA es tranquilizadora para el conjunto de la opinión pública".

- "Con detención o sin detención de este comando, con la información de la que dispone el Ministerio del Interior, la conclusión es siempre la misma: ETA solo tiene un destino, acabar cuanto antes de forma definitiva; eso significa desaparecer, hacer desaparecer de nuestras vidas y de la vida de este país esas siglas. No vamos a parar hasta conseguirlo, y se va a conseguir".

- "Más allá de treguas, comunicados o posturas políticas de unos y otros, es una voluntad muy fuerte del país que lidera el Gobierno. Cuanto antes sean plenamente conscientes de esta realidad, que no va a cambiar, antes llegarán a ese destino final, el desistimiento y la desaparición".

- "Con tregua o sin tregua, seguimos con la guardia muy alta y la confianza cada día más fuerte en el fin de la violencia".

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