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Las consecuencias del ajuste económico

Zapatero: "Sí, cambié de opinión por las circunstancias, no por convicciones"

El presidente rechaza que el ajuste económico le fuera impuesto por sus socios

Miguel González

El pacto de no agresión que ha regido durante el semestre de presidencia española de la UE se rompió ayer en el Congreso. La comparecencia del presidente José Luis Rodríguez Zapatero para informar del Consejo Europeo del pasado día 17 en Bruselas sirvió para que los grupos de la oposición pusieran nota a la gestión del Gobierno al frente de la UE. Y la valoración casi unánime fue de suspenso, aunque el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, admitió que si los resultados se analizan por sí mismos, sin tener en cuenta las desmesuradas expectativas, la calificación podía elevarse a un "aprobado justo".

Mucho más duro se mostró el líder del PP, Mariano Rajoy, quien habló de "rotundo fracaso" y calificó la presidencia española como "de bajo nivel, deslucida, con una mediocre gestión política", de la que solo salvó la actuación profesional de funcionarios y diplomáticos. El portavoz del PNV, Josu Erkoreka, tildó de "agridulce" el balance y atribuyó las decisiones de mayor calado, como el plan de rescate a Grecia o la creación del fondo de estabilización de 750.000 millones de euros, a la "presidencia fáctica" alemana. Joan Ridao, de ERC, aseguró que la economía española está "intervenida"; mientras Gaspar Llamazares, de IU, calificó de "volantazo a la derecha" la decisión de Zapatero de recortar en un 5% la retribución de los empleados públicos y congelar las pensiones en 2011.

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"Sí, cambié de opinión por las circunstancias, no por las convicciones", admitió Zapatero en la réplica, para agregar que su cambio de criterio en la segunda semana de mayo, cuando pasó de descartar mayores recortes del gasto público a acelerar la reducción del déficit, no vino motivado por la imposición de sus socios de la UE, sino por la crisis de los mercados financieros y la escalada en los intereses de la deuda. "Cambié de opinión porque cuando tuvimos una crisis tan grave hubo que reaccionar. Por eso tuve que traer aquí ese programa duro y difícil, que por supuesto no contó con su apoyo porque era un ejercicio extraordinario de responsabilidad", le espetó a Rajoy.

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Zapatero tachó de "decimonónica" la visión de las relaciones internacionales del líder del PP, quien aseguró que la economía española está en régimen de "protectorado", y consideró normal que los países de la UE sean "exigentes" con las cuentas de sus socios, ya que solo a España la aplicación del fondo de estabilización del euro le costaría más de 50.000 millones.

Más molesto se mostró por el hecho de que Rajoy cuestionara si su decisión de ceder protagonismo al nuevo presidente permanente del Consejo Europeo, el belga Herman van Rompuy, había sido voluntaria o forzada. "Eso le ha pasado a usted a veces en su trayectoria política y cree que también puede sucederle a los demás", le respondió.

No menos duro fue con la diputada Rosa Díez, a quien reprochó que le acusara de escudarse en el patriotismo, "con las veces que la hemos visto [a usted] envolverse en una bandera después de un proceso ideológico de transformación tan profunda".

En conclusión, consideró "satisfactoria" la presidencia española de la UE y aseguró que "seis meses después el prestigio de España afortunadamente está a salvo". Aunque insistió en que los ataques contra la solvencia de la economía española se han basado sobre todo en "exageraciones y rumores", reconoció que también "hay datos objetivos para la preocupación".

Ya al final del debate, Zapatero defendió la reforma laboral y se mostró pesimista sobre la posibilidad de llegar a un pacto con el PP sobre este tema, la reducción del déficit o la reforma de las pensiones. "¡Ojalá!, pero reconózcame que no es fácil", le dijo a Carlos Salvador, de Unión del Pueblo Navarro (UPN).

Rajoy y González Pons (detrás) en el Pleno de ayer.
Rajoy y González Pons (detrás) en el Pleno de ayer.GORKA LEJARCEGI

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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