El accidente de una viajera interrumpe 45 minutos el metro en Ópera

Eran las 16.45 en la concurrida estación de metro de Ópera en Madrid. La veinteañera Rocío A. G. quería tomar la línea 5 en dirección a Casa de Campo y corrió para entrar a tiempo en el vagón, cuyas puertas ya se cerraban. Vestía vaqueros y chanclas y éstas le jugaron una mala pasada porque, en cuanto las puertas se cerraron, Rocío resbaló y cayó de espaldas contra el suelo del tren.

Se había golpeado fuertemente el coxis. No podía moverse. Empezó a llorar. Según ha relatado una testigo, los agentes de seguridad de Metro intentaron desplazarla pero ella -sin parar de llorar- decía que no podía mover las piernas. En menos de 15 minutos aparecieron los sanitarios del Samur, que tras inmovilizarla y esperar a un médico de apoyo para que la anestesiase, para evitar los dolores durante el trayecto, se la llevaron al hospital de la Concepción.

Permanece todavía en urgencias con una fractura lumbar y un traumatismo cranoencefálico, según fuentes del centro médico. No se ha concretado la gravedad del diagnóstico.