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El terrorismo vuelve a situarse como principal preocupación para los españoles

El 42% de los encuestados por el CIS lo cita entre sus principales problemas.- Los vascos agudizan su pesimismo respecto al fin de ETA

La preocupación por el terrorismo ha experimentado una subida de diez puntos en el último barómetro del CIS, elaborado tras el fin de la tregua de ETA, y ha pasado del cuarto al primer puesto en la lista de principales problemas ciudadanos, al ser citado por el 41,7% de los encuestados.

El muestreo, realizado del 22 al 30 de junio, sitúa el paro como segunda preocupación ciudadana, citado por el 38,%, seguido de la vivienda, que se coloca en el tercer puesto, con el 30,8%, 4,1 puntos menos que en el anterior barómetro.

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En la misma encuesta, se aprecia una mejora en la percepción que los españoles tienen de la situación política, considerada "buena" o "muy buena" por el 17,7 % (el 14,6% en mayo), tendencia que se repite en la situación económica, ya que un 28,9% la califica de "buena" o "muy buena" (el 27,2% en mayo).

Pesimismo entre los vascos

El pesimismo sobre la evolución del terrorismo también se agudiza entre los vascos. Un 69% desconfía de que se esté a las puertas del final de la violencia, que vuelve al primer plano de sus preocupaciones, arrebatando al paro su tradicional puesto de cabecera, según el último Euskobarómetro.

La última oleada del estudio de opinión elaborado por un equipo de la Universidad del País Vasco -mediante 1.200 entrevistas en junio pasado a ciudadanos vascos- refleja un escenario de pesimismo, influido por la ruptura del alto el fuego de ETA, y "un cierto desconcierto" en el electorado de la izquierda abertzale al quedar mayoritariamente "sin opinión" sobre su apoyo a la violencia, según ha interpretado en Bilbao el director del sondeo, Francisco Llera.

En un contexto de empeoramiento del clima político, los vascos se encuentran más divididos que nunca ante una eventual negociación entre el Gobierno y ETA, según ésta sea incondicional (un 43% la apoyaría) o condicionada a su abandono de las armas (un 41% lo haría).

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