El arsenal de ETA desmantelado en Francia guardaba 500 kilos de explosivos
El golpe a la banda se considera el más importante desde la operación de Bidart, en 1993
El arsenal de ETA descubierto el domingo por la policía francesa en la pequeña localidad de Saint-Michel albergaba media tonelada de explosivos, según las primeras evaluaciones. En un anexo al caserío, que no podía verse desde la calle, existía una taller dotado con dos tornos eléctricos para la fabricación de bombas, en uso desde hace unos seis años. El golpe a la organización terrorista es considerado el más importante desde la operación que permitió desmantelar, en febrero de 1993, la fábrica de armas y explosivos de Bidart, también en el País Vasco francés.
La localidad bajonavarra de Saint-Michel, de 283 habitantes, está situada a una decena de kilómetros de la frontera hispanofrancesa. El arsenal y taller de granadas se encontraba en funcionamiento al menos desde hace seis años, según fuentes de la investigación, y es casi con seguridad el más importante con que contaba ETA.
La instalación disponía de dos tornos para la fabricación de las granadas Jotake y otros proyectiles de mortero. Se sospecha que el caserío Lakoa, propiedad de un pastor de 50 años, servía también para fabricar amonal. En los registros se han encontrado los componentes y el explosivo ya elaborado, concretamente unos 300 kilos, además de 100 kilos de cloratita y otros 100 de Semtex y algunos cartuchos de dinamita, informa Vasco Press.
El dueño de la casa, el francés Jean-Marie Saint Pée, fue detenido el domingo junto al presunto miembro de ETA José Zeberio Aierbe, del que se cree que era el encargado del taller.Fuentes de la lucha antiterrorista francesa subrayaron ayer la importancia para ETA de la instalación desmantelada. No se trataba de un escondite o un simple almacén, sino de una "fábrica activa" dedicada a preparar los explosivos empleados por el aparato militar para los atentados.
El material se encontraba diseminado por la planta alta de la casa, un granero y una edificación para guardar ovejas, y "no está almacenado, sino tirado de cualquier manera", indicó una fuente policial, que aseguró que se han hallado bolsas con explosivo junto al estiércol de la explotación ganadera.
El taller, de 15 metros cuadrados, contaba con dos tornos eléctricos que se utilizaban para fabricar los proyectiles tipo Jotake y la nueva versión, denominada Handia. Este último tipo de granada fue utilizado el pasado octubre en el atentado contra la base militar de Ainzoain, cerca de Pamplona.
Granadas y bombonas
En el taller había un una docena de proyectiles en fase de fabricación y bombonas vacías para ser cargadas de explosivo y disparadas con el tubo lanzador Handia. Este proyectil puede cargar más de 20 kilos de explosivo. La policía se ha incautado de una decena de pistolas, varios fusiles, más de 200 detonadores, ampollas de mercurio utilizadas en las bombas-lapa, temporizadores y cordón detonante. Todavía hay muchas cajas que no han sido abiertas, por lo que el inventario del arsenal no es completo.
La operación policial había comenzado el viernes, día 2, con la detención de Félix Ignacio Esparza Luri en la localidad de Saint-Paul le Dax, en el departamento de Las Landas. Esparza, que fue ayer procesado en París por asociación de malhechores con fines terroristas, extorsión y otros cargos, informa Efe, es considerado por la policía jefe del aparato logístico de ETA.
El mismo día por la tarde era capturado Félix Alberto López de Lacalle Mobutu, en Angulema, una ciudad de 150.000 habitantes situada al norte de Burdeos, a algo más de 300 kilómetros de la frontera. Con Mobutu fue arrestada su compañera sentimental, Mercedes Chivite Berango, que perteneció al comando Madrid. Entre los tres, acumulan un dilatado historial, que suma la presunta autoría de 15 asesinatos.
López de Lacalle está considerado el coordinador de los diferentes aparatos de ETA. Documentos hallados en su poder facilitaron, según la policía, la pista del caserío Lakoa. El aparato logístico de ETA sufrió el pasado febrero otro golpe con la detención de Luis Enrique Gárate Galarza e Ibon Elorrieta, que fueron sorprendidos por la policía al norte de Burdeos cuando transportaban en una furgoneta los componentes de un mortero Handia. Gárate estaba considerado el responsable de fabricación de ETA y se sospecha que tenía bajo su mando el taller de Saint-Michel.
