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Recogidas diez toneladas de fuel del barco hundido en Ibiza

Una tubería sigue rota, pero se prevé que la grieta sea cerrada este viernes.- Clausurada una tercera playa

Los equipos de buceo que inspeccionan el mercante Don Pedro hundido el martes en Ibiza han descubierto una tubería rota por la que sale combustible, ha informado la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien ha asegurado que hasta ahora se han recogido 10 toneladas de fuel del mar.

En una rueda de prensa tras una reunión de coordinación en relación al suceso, la ministra ha afirmado que está previsto que este viernes se pueda cerrar la citada grieta. También ha dicho que este jueves se taponó el tercer y último respiradero por el que salía vertido del buque, que transportaba 150 toneladas de fuel y 50 toneladas de gasóleo.

El área afectada ocupa aproximadamente 3 millas y media de largo por media de ancho, según Álvarez, aunque solo un 60% de ese espacio es el que está contaminado.

Magdalena Álvarez ha anunciado también que en las próximas horas llergarán a la isla 3.500 metros de barreras anticontaminación para tratar de frenar la llegada del combustible.

Según ha destacado Álvarez, ahora se intensificarán las tareas de limpieza, una vez frenada la salida de fuel, que era lo que más preocupación ha despertado por los efectos negativos que pueda tener sobre el medio ambiente y el turismo. Así, este viernes, se desplazarán desde la Península más organismos para aplicar las "más modernas técnicas" de control de este tipo de sustancias.

La titular de Fomento ha remarcado que de la extensión afectada, sólo el 15% es material contaminante, y ha recordado que los tanques del barco donde se depositaban las aproximadamente 100 toneladas de carburante, no se han dañado "ni hay riesgo de rotura". Álvarez, además, ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos y ha asegurado que en las aguas ibicencas trabajan los medios más novedosos mundialmente en la lucha contra la contaminación.

Tres playas cerradas

La mancha de combustible vertido al mar en la madrugada del miércoles tras el hundimiento del mercante Don Pedro frente al puerto de Ibiza afecta ya a seis kilómetros de costa y ha obligado a cerrar tres playas. Según Salvamento Marítimo, el 80% de la mancha está controlada gracias a los trabajos de taponamiento de las fisuras del buque. La Fiscalía de Baleares ha abierto una investigación sobre las causas del hundimiento y sus consecuencias.

El Ayuntamiento de Ibiza ha izado a primera hora de este jueves la bandera roja en la playa de Talamaca para evitar posibles problemas sanitarios ante una eventual insalubridad del agua. Mientras, se trabaja para retirar a mano los restos de combustible que cubren la orilla y parte de la arena. "Parece que la situación está controlada", ha comentado la alcaldesa de Vila, Lourdes Cista, quien ha añadido que, aunque en un principio creían que no se llegaría a esta situación, "el viento ha provocado que finalmente la mancha se acerque a la costa".

Otra playa, Figueretas, ha tenido que ser cerrada al público debido a la amenaza del combustible, mientras que la de Embossa, la más grande de la isla y la que más complejos turísticos congrega, estaba en alerta y ha sido finalmente cerrada por la tarde, según informa la Cadena SER. Hoteleros de la zona consideran que algunas informaciones sobre el vertido son "exageradas", lo que podría afectar al turismo en la zona.

Sin consecuencias "excesivamente negativas"

Salvamento Marítimo se muestra optimista al evaluar la situación. El dispositivo enviado a la zona ha sellado la última fisura del buque por la que todavía salía combustible. Según Salvamento, que ha colocado nuevas barreras de contención para que la mancha no continúe hacia la costa, el 80% del vertido está controlado. También el presidente balear, Francesc Antich, que ha visitado la zona para evaluar los daños, se ha mostrado optimista y ha apuntado que las consecuencias de la fuga no serán "excesivamente negativas".

La organización ecologista Greenpeace ha instado a las administraciones a que retiren cuanto antes el fuel del mar, para evitar daños en el fondo marino, especialmente en las praderas de posidonia que pueblan el ecosistema de la zona y que se extienden hasta Formentera. Esta última isla ha comenzado a tomar medidas de seguridad como precaución por si parte del vertido toca su costa.

La Fiscalía de Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares ha acordado la apertura de diligencias informativas remitiéndose al SEPRONA para que se hagan las oportunas investigaciones con el fin de determinar las causas del vertido y si éste puede ocasionar un "grave peligro" para los recursos naturales o la salud de las personas.

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