Tres ciudades auguran recortes en los servicios por la falta de dinero

Madrid, Zaragoza y Málaga unen fuerzas para reclamar financiación al Gobierno

Zaragoza - 10 sept 2008 - 00:00CEST

Tres grandes ciudades con gobiernos de distinto color cerraron ayer un documento conjunto para trasladar al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero la asfixia económica de los ayuntamientos y pedirle que abra el grifo del dinero. Los concejales de Hacienda de Madrid (PP), Zaragoza (PSOE) y Málaga (PP) se reunieron en la capital maña y advirtieron: si no llega más financiación, algunos servicios públicos "no básicos" podrían verse recortados.

"Aquí no hay ningún frente de alcaldes insumisos. Sólo hemos querido poner en común nuestros problemas. Ahora llevaremos el documento a la Federación Española de Municipios y Provincias, que es la interlocutora del Gobierno", subrayó el edil zaragozano Francisco Catalá.

Los tres concejales se mostraron "muy preocupados" por la posibilidad de que el Ejecutivo congele el fondo estatal para los ayuntamientos en 2009. "Sería nefasto", protestó la malagueña Carolina España. "Tendríamos problemas graves para prestar algunos servicios", dijo Catalá, que rápidamente matizó: "No los servicios básicos". El edil de Madrid, Juan Bravo, añadió: "Todos tenemos proyectadas nuevas guarderías, centros de día, polideportivos... Habría que ver si podemos financiarlos. No se cerraría ningún servicio existente, pero a lo mejor habría que aplazar los nuevos".

El documento pide -además de una inyección de dinero "sin demora"- que se permita a los ayuntamientos endeudarse tanto como a las comunidades autónomas y a incurrir en déficit al menos hasta 2010; y que la negociación económica con las comunidades no sea a costa de los municipios. "Si el Gobierno no garantiza un nuevo modelo financiero, habrá que tomar decisiones que a nadie le gusta tomar", afirmó Bravo, a quien el ministro Pedro Solbes afeó ayer que pida más dinero después de disparar la deuda de Madrid. Bravo le respondió: "¿Entonces también es reprobable que el ministro empezase el año con superávit y lo acabe con déficit?"

Antes había reconocido que los ayuntamientos han estado exprimiendo recursos que ahora se han agotado: "En los años 80 recurrimos a la deuda; en los 90, a la venta de suelo. Eso debió ser puntual, pero se convirtió en estructural porque no había otra forma de sacar financiación. Y ahora hay crisis: no se vende suelo, no se recauda lo previsto... Ya no tenemos recurso alternativo".

El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch (derecha), ayer, en su despacho, con los concejales de Hacienda de Zaragoza, Francisco Catalá; Madrid, Juan Bravo, y Málaga, Carolina España.AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA

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Las presiones del PSOE a Belloch

A la reunión de ayer, con Zaragoza de anfitriona, habían sido invitadas otras cinco ciudades: tres del PP (Madrid, Valencia y Málaga) y dos del PSOE (Barcelona y Sevilla). Las seis grandes ciudades españolas. El concejal de Valencia falló "por un problema de agenda", según explicó el edil zaragozano Francisco Catalá; los de Barcelona y Sevilla, "porque recibieron las suficientes presiones por parte del PSOE para no venir", dijo.

El propio alcalde de Zaragoza, el socialista Juan Alberto Belloch, lo confirmó después: la dirección de su partido le llamó hace días para pedirle que desconvocara la reunión, y él se negó. Ayer no dudó en hacerse la foto con los concejales del PP, porque "sería pervertir el modelo constitucional si un alcalde dependiera de las órdenes de su partido". "Los concejales que no han venido me dijeron que ellos querían venir pero recibieron indicaciones para no hacerlo", apostilló Belloch.

También ha causado enfado la convocatoria en la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que negocia con el Gobierno para lograr una mejora de la financiación. Los tres concejales reunidos trataron de quitar hierro a esa pelea: "El interlocutor es la FEMP, nosotros sólo hemos querido facilitarle el trabajo para reforzar su labor", alegó Francisco Catalá.