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ATENTADO TERRORISTA

Un coche bomba de ETA estalla junto al estadio olímpico de Madrid, sin víctimas

Interior esperaba un ataque en la capital días antes de la decisión del COI sobre los Juegos de 2012

Jorge A. Rodríguez

ETA hizo estallar a las 19.03 de ayer un coche bomba que una pareja de terroristas había aparcado junto al estadio de La Peineta, en los límites del barrio madrileño de San Blas, instalación principal de la candidatura de Madrid para los Juegos Olímpicos de 2012. La explosión no causó víctimas, ya que la zona había sido desalojada después de que un comunicante anónimo avisara a las 18.00 al diario Gara y a la DYA de San Sebastián. El atentado, el cuarto en Madrid en lo que va de año (incluido el del Valle de los Caídos) y el sexto en toda España desde que el Congreso aprobara su propuesta de diálogo con ETA, era casi esperado. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad temían algo así antes de que el Comité Olímpico Internacional (COI) decidiera, el próximo 6 de julio, sobre la sede de los Juegos de 2012. El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, mostró su confianza en que el atentado no afecte a la candidatura de la capital de España.

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El coche con la bomba, un Renault 19 robado en Vitoria el pasado 29 de mayo y denunciado al día siguiente, había sido colocado, sobre las siete de la mañana de ayer, junto a la entrada a los gimnasios del estadio. Toda la zona está en obras (se construye una boca de Metro, aparcamientos y la zona acuática). El vehículo estaba estacionado en un estrecho aparcamiento, al que el acceso está teóricamente restringido.

El diario Gara y la DYA transmitieron el aviso a la Ertzaintza y ésta a las Fuerzas de Seguridad en Madrid. A las 18.30 la zona estaba atestada de policías que conminaban a los vecinos a meterse en sus casas. "Yo estaba saliendo del tendedero, porque había salido a abrir por el calor, y cuando iba a volver se produjo la explosión que me tiró para atrás", relató Ricardo González, vecino de la cercana calle de María Sevilla Diego.

Obreros desalojados

Los agentes desalojaron a unos 150 trabajadores, la mayoría africanos de Guinea Bissau y Senegal, que trabajaban en el Metro. "Vino la policía y nos dijo todos fuera, y aquí", relataba un guineano, Michel, sentado a la sombra de una falsa acacia. La explosión, al producirse en una zona muy abierta, pudo escucharse a algunos kilómetros a la redonda.

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El estallido dañó otros dos coches que estaban junto al de la bomba. Una primera llamarada blanca precedió a una densa humareda negra. Los bomberos tardaron unos minutos en llegar y al cuarto de hora tenían todo controlado. No obstante, se mantuvo un fuerte dispositivo de seguridad en la zona debido a que la policía localizó un Audi con las cerraduras forzadas. Su relación con el atentado fue descartada sobre las 20.00.

Pasada la alarma, comenzaron a revisar el vehículo los Técnicos en Desactivación de Artefactos Explosivos de la policía (Tedax), que desde ayer celebraban los actos del 30º aniversario de su creación. Según sus primeros cálculos, se trata de una bomba de unos 15 o 20 kilos, posiblemente de cloratita, como la del coche que estalló, también en San Blas el 25 de mayo.

El atentado, obviamente, trata de perjudicar la candidatura de Madrid 2012 ante la decisión que el COI tomará sobre la sede de los Juegos el 6 de julio en Singapur. Precisamente, la seguridad es uno de los aspectos mejor valorados de Madrid. El alcalde confiaba ayer en que el ataque, ocurrido en una zona en obras y sin vigilancia, no perjudique a Madrid. "Estoy seguro de que los miembros del COI no se dejarán impresionar por esta bomba de ETA, que pretende perjudicar nuestra candidatura". Tras hacer esta declaración en la plaza de Grecia, glorieta que da entrada al estadio olímpico, Ruiz-Gallardón añadió: "La seguridad está garantizada. ETA pretende dar imagen de inseguridad, pero no es así".

Los servicios antiterroristas estaban convencidos de que, a pesar (y por) el comunicado de ETA del sábado pasado (en el que anunciaba que renunciaba a matar cargos electos), la banda iba a atentar en Madrid. "Tenían previsto seguir, sobre todo en su campaña contra el turismo y contra los intereses económicos españoles, y Madrid 2012 cumple ambas condiciones", decía ayer un alto cargo de los servicios de Información. Además, el 27 de abril, la policía francesa descubrió en poder de Peio Ezkizabel, miembro de la cúpula etarra, anotaciones sobre Madrid 2012, incluida la ubicación de La Peineta. Los datos procedían de la web de la candidatura, pero dejaba bien claras las intenciones de ETA.

Pese a que el de ayer es el tercer atentado que ETA comete en Madrid en el último mes (el cuarto en este año), el hecho de que el coche fuera robado en Vitoria hace pensar a las fuerzas de seguridad que la banda sigue sin tener estructura estable en la capital y que lo de ayer fue obra de un comando itinerante. Tres de los cuatro se han cometido en las inmediaciones de la carretera Madrid-Barcelona.

La columna de humo marca el lugar en el que estalló el coche bomba, en un aparcamiento del lateral del estadio olímpico de La Peineta.
La columna de humo marca el lugar en el que estalló el coche bomba, en un aparcamiento del lateral del estadio olímpico de La Peineta.JUAN MANUEL ANGULO

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Sobre la firma

Jorge A. Rodríguez
Redactor jefe digital en España y profesor de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Debutó en el Diario Sur de Málaga, siguió en RNE, pasó a la agencia OTR Press (Grupo Z) y llegó a EL PAÍS. Ha cubierto íntegros casos como el 11-M, el final de ETA, Arny, el naufragio del 'Prestige', los disturbios del Ejido... y muchos crímenes (jorgear@elpais.es)

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