"No creo en las improvisaciones sino en el trabajo de tres años"
Mediodía en la sede del Partido Socialista de Madrid. Apenas hay movimiento, nada que delate que acaba de iniciarse la madre de todas las batallas por el poder en esta organización política. Tomás Gómez, de 42 años, es el primer líder regional que se niega a cumplir los deseos de José Luis Rodríguez Zapatero. Tras reunirse el pasado sábado con el presidente, Gómez rechazó dejar a Trinidad Jiménez el primer puesto de la candidatura socialista a la Comunidad de Madrid. El dirigente madrileño recibe a EL PAÍS en su despacho solo tres horas después de conocer oficialmente que Jiménez le disputará el puesto en unas elecciones primarias, las primeras que celebrará el PSOE en toda su historia para dirimir la candidatura de la Comunidad de Madrid.
"Yo apoyo a Zapatero, pero no me apoyo en Zapatero"
"Mi palabra tiene mucho valor, es lo que me enseñaron en mi casa"
"Es un hándicap importante la designación tardía de la candidatura"
"El PSOE nunca ha tomado las decisiones en base a las encuestas"
"[Si Zapatero habla a favor de Jiménez], será su decisión y su responsabilidad"
"Madrid no es ningún reducto rebelde a la dirección nacional"
Gómez presume de que antes de hablar con EL PAÍS llevaba 10 días en silencio, sin hacer declaraciones públicas. Durante la entrevista, hay momentos en que parece prolongar esa situación porque sus respuestas, aunque llenas de palabras, significan más silencio.
Pregunta. Trinidad Jiménez ha dicho que Zapatero no le ha pedido que se presente a las primarias. ¿Usted se lo cree?
Respuesta. No tengo por qué dudar de la palabra de Trinidad Jiménez....
P. ¿Pero se lo cree o no?
R. Vamos a ver... Este es un proceso de alta democracia. Los socialistas de Madrid hemos conseguido que sean los militantes madrileños los que tomen la decisión acerca de quiénes tienen que encabezar la candidatura a la Comunidad de Madrid. Es un éxito de la democracia.
P. ¿Cómo fue la entrevista con el presidente?
R. Soy una persona muy leal, es parte de mi ADN. Las reuniones con el secretario general del partido y presidente ni las anuncio ni las comento. En todo caso, lo que sí que existe es una relación personal extraordinaria.
P. ¿Esperaba este desenlace?
R. Es que es algo que venimos pidiendo los socialistas madrileños....
P. No pedirían unas primarias para enfrentarse con una candidata ministra apoyada por la dirección nacional...
R. Uno de mis compromisos más importantes con el conjunto de afiliados al PSOE de Madrid es la elección a través de procesos de primarias de los candidatos, en este caso el candidato a la Comunidad. Las primarias han sido una constante en mi vida. Fui alcalde de Parla a partir de un proceso de primarias, fui secretario general después de que otros compañeros compitieran por ese puesto. Manuel Azaña decía que los españoles somos un pueblo que hacemos lo razonable después de intentar todo lo demás. Ya es hora de que el Partido Socialista de Madrid haga lo razonable.
P. ¿Esperaba que una ministra le disputase el puesto?
R. En un proceso de primarias, cualquier militante puede presentar su candidatura.
P. ¿Cuándo perdió el apoyo de la ejecutiva federal?
R. Que yo sepa no hay ninguna decisión de la ejecutiva federal, ni me consta que se haya producido ningún debate en ese sentido.
P. Hay significados dirigentes de la Ejecutiva Federal del PSOE que han hecho público su apoyo a Trinidad Jiménez y que dicen que usted antepone sus intereses personales a los del PSOE en la Comunidad de Madrid. ¿Qué le parece?
R. La opinión de los militantes del partido es legítima y respetable, pero desde luego ya dije que aunque me propusieran ser ministro esto no es una carrera personal ni profesional. Esto es una posición ética, de que mi palabra tiene mucho valor, que es lo que me han enseñado en mi casa. Que cuando yo me comprometí con esta federación hace tres años a liderar este proyecto respaldado por el 90% de nuestra organización y prometí dedicarme en cuerpo y alma, no he hecho otra cosa que atender a esa responsabilidad ética y en ningún caso a atender a una carrera personal. Creo que la política es el instrumento para convertir sueños en realidades. Hemos conseguido construir un sueño colectivo en estos tres años y el objetivo es que, pase lo que pase en las primarias, no tengo ninguna duda de que se va a producir un cambio de Gobierno en esta Comunidad.
P. La dirección federal esgrime las encuestas para justificar la necesidad de que Trinidad Jiménez sea la candidata. ¿Qué opina?
R. Esto de las encuestas es siempre muy relativo y coyuntural. No es la forma en que esta organización ha decidido nunca ni tomado sus decisiones. Las encuestas son instrumentos que hay que tener en cuenta, pero nunca han sido decisivas porque siempre son coyunturales y hemos visto cómo pueden modificarse las circunstancias.
P. Dice Antonio Hernando, miembro de la ejecutiva federal, que Tomás Gómez sabe que Trinidad Jiménez es mejor candidata. ¿Usted lo sabe?
R. Creo que lo mejor es el proyecto del Partido Socialista de Madrid. Un partido respetable y respetado que quiere tomar sus propias decisiones, porque si no somos capaces de tomar nuestras propias decisiones, poca confianza vamos a proyectar entre los ciudadanos. No creo en las improvisaciones, sino en el trabajo de más de tres años que lleva esta organización. La política de éxito es la que mira de frente los problemas reales que tienen los ciudadanos. Y los problemas que tienen los ciudadanos en Madrid es la sanidad, es la educación, es la no puesta en marcha de las ayudas a la dependencia.
P. Usted llegó a proponer hace un año que se resolviera el asunto de las candidaturas. ¿Presumía que podría ocurrir lo que finalmente ha pasado?
R. Lo que propusimos hace año y medio era la decisión acerca de la candidatura a la Alcaldía de Madrid, que es la capital del Estado. Nunca pedimos la confirmación de la candidatura autonómica. Dicho esto, es un hándicap importante una designación tardía de candidatura. Porque durante todo este tiempo ha sido más importante a efectos mediáticos el debate sobre cómo quedaría la candidatura autonómica que el trabajo de oposición política. Pero en ningún caso hemos pedido el anticipo de la candidatura autonómica.
P. ¿Cree que fue un error de Zapatero aplazar las candidaturas autonómicas hasta septiembre de este año?
R. Bueno, en términos objetivos ha sido un hándicap. Se ha hablado más de nombres y apellidos y de candidaturas que de contenidos políticos, que de proyectos alternativos... De los 20 minutos que tiene uno para colocar mensajes en los medios de comunicación, tres cuartas partes del tiempo se los ha llevado un debate que para nada nos venía bien.
P. ¿Entendería que Blanco o Zapatero hicieran declaraciones públicas a favor de Trinidad Jiménez o cree que deben mantenerse neutrales?
R. Yo apoyo a Zapatero, pero no me apoyo en Zapatero. Prefiero hablar de lo mal que hace las cosas el PP en Madrid, inmersos en procesos de corrupción y espionaje permanente, prefiero hablar de los problemas que tiene la sanidad madrileña, o de lo que podría hacer esta Comunidad en materia de empleo, que podría crear 150.000 empleos en seis meses...
P. Pero si Blanco o Zapatero hablaran a favor de Jiménez, ¿se rompería el juego limpio?
R. Será su decisión y, por tanto, su responsabilidad.
P. Ustedes han pedido neutralidad a la dirección federal.
R. No tengo dudas de que eso va a ser así. El aparato federal tiene una potencia indudable en todos los territorios, pero no tengo ninguna duda de que va a haber esa neutralidad y quien va a tomar la decisión es la militancia de Madrid. Las primarias son una oportunidad de oro para que los ciudadanos conozcan nuestro proyecto político, renovado y sólido, que durante tres años se está forjando a fuego lento en esta forja de ideas que es el Partido Socialista de Madrid. El debate interno debe ser respetuoso y elegante, tenemos claro que nuestro adversario es el PP.
P. ¿Puede seguir siendo secretario general del PSM si pierde estas primarias?
R. Vamos a ver qué pasa en estas primarias. Voy a poner todo mi esfuerzo, todas las ganas, toda la ilusión, en ser el ganador.
P. ¿Madrid es el primer reducto rebelde de la era Zapatero y de la dirección nacional?
R. Madrid no es ningún reducto rebelde, insisto en lo de antes: apoyo a Zapatero, no me apoyo en Zapatero.
P. ¿Se arrepiente de haber criticado a José Blanco?
R. Yo no he criticado nunca públicamente a José Blanco.
P. Lo hizo en la ejecutiva.
R. Los órganos internos del partido son órganos en los que los debates son secretos. Sería desleal con mi partido e indisciplinado si yo hablase en un sentido u otro de los debates que se puedan producir.
