La defensa de Garzón pide que se le aplique la 'doctrina Botín'

El abogado defensor del juez Baltasar Garzón en el proceso penal que le abrió el Tribunal Supremo por investigar el franquismo ha solicitado que se le aplique la doctrina Botín y no sea juzgado, al no haber contra él más que una acusación popular y no estar acusado por el Ministerio Fiscal. Así lo acordó el Supremo en un proceso contra el presidente del banco Santander, Emilio Botín.

En su escrito, de 140 folios, el abogado Gonzalo Martínez-Fresneda protesta por el hecho de que el magistrado instructor, Luciano Varela, no haya querido suspender el trámite para presentar el escrito de defensa, a pesar de que quedan pendientes de resolver seis recursos ante la Sala Segunda cuya decisión afectaría sustancialmente al contenido de ese escrito. Reitera además a la Sala de lo Penal la nulidad de actuaciones por las indicaciones que dio Varela al pseudosindicato ultraderechista Manos Limpias sobre cómo debía presentar su escrito de acusación. Varela señaló las páginas que debía suprimir y un párrafo que debía incorporar. Según la defensa, el juez no solo "vulneró normas esenciales del procedimiento, sino que tomó abiertamente partido en favor de una de las partes".

El abogado Gonzalo Martínez-Fresneda también solicita la nulidad del escrito de acusación de Manos Limpias, que en su mayor parte está copiado literalmente de un auto del juez instructor.

Martínez-Fresneda rechaza que Garzón haya podido cometer prevaricación, delito del que el Supremo absolvió al juez Francisco Javier Urquía, que dictó una resolución favorable a la persona de la que recibió un cohecho.

Entre las pruebas para el juicio, la defensa propone el testimonio de una veintena de representantes de asociaciones de Memoria Histórica, así como los testigos rechazados Varela, entre ellos una representación de juristas internacionales y los magistrados de la Audiencia Nacional que respaldaron a Garzón.