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"Se estaba fraguando un enfrentamiento a muerte y lo habíamos anunciado"

Tres heridos por arma blanca en Palma en una reyerta que congrega a un millar de gitanos y nigerianos.- El suceso se inició por una disputa por unas gafas de sol

Tres personas han resultado heridas por arma blanca y varias decenas han sufrido contusiones. Pero las consecuencias podían haber sido mucho peores. La multitudinaria reyerta que congregó a un millar de personas ocurrida anoche en el barrio de Son Gotleu, en Palma, entre nigerianos y gitanos "era una guerra que ya se había declarado desde hace años", se lamenta el presidente de la Asociación de Vecinos Orson Welles, Ginés Quiñonero Solano. "Ha quedado demostrada la inoperancia de las autoridades ante un enfrentamiento a muerte que se estaba fraguando" y que los vecinos habían denunciado en reiteradas ocasiones, critica Quiñonero, que responsabiliza al Ayuntamiento de Palma "del acontecimiento más grave" acaecido hasta ahora en el distrito por no haber actuado antes.

Todo comenzó por una disputa sobre unas gafas de sol. Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Baleares, una mujer de etnia gitana perdió las gafas por la ventanilla de un coche. Cuando paró a recogerlas, vio que las tenía un hombre nigeriano que se negó a devolvérselas. Comenzó entonces una disputa verbal a la que fueron sumándose un número indeterminado de personas hasta derivar en una riña multitudinaria en la que se registraron decenas de heridos por el lanzamiento de ladrillos y botellas de vidrio. Dos unidades de Intervención Inmediata de la Policía Local y unidades de Antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía realizaron dos cargas para frenar la reyerta.

"Esto es solo un chispazo porque hay un odio entre gitanos y nigerianos que se ha ido gestando durante varios años", asegura Ginés Quiñonero. Según el presidente de la Asociación de Vecinos, éste no ha sido el primer enfrentamiento entre los dos grupos. "Hace tres años unas 40 personas entre gitanos y nigerianos se liaron a palos y navajazos", explica Quiñonero. Desde entonces, asegura, "dicen que se tienen que liquidar".

Los vecinos tienen miedo. Desde hace años denuncian las irregularidades que observan en el barrio. Tráfico de drogas, prostitución de menores, negocios ilegales o pensiones clandestinas son, según la Asociación de Vecinos Orson Welles, los problemas diarios de Son Gotleu. "Sólo los que no tienen dinero se quedan aquí", se queja Quiñonero. Y añade: "Es una historia de miedo, no un acontecimiento aislado".

Una reyerta ayer en Palma congrega a un millar de personas.
Una reyerta ayer en Palma congrega a un millar de personas.ASOCIACIÓN DE VECINOS ORSON WELLES

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