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Los jueces culpan a la policía de la puesta en libertad del agresor de José Luis Moreno

Interior cursa orden de búsqueda y captura contra Astrid Bushi, cabecilla de una banda de albaneses y considerado como muy peligroso

Astrid Bushi, jefe de la banda de albaneses que asaltó la casa del productor José Luis Moreno en diciembre de 2007 dejándolo herido de gravedad, fue puesto en libertad el pasado martes por error , según fuentes policiales. El delincuente salió por su propio pie y sin que nadie se lo impidiera del edificio de los juzgados de Alcobendas, adonde había sido trasladado desde la cárcel en la que permanecía en prisión preventiva. Tras permanecer en los calabozos y cumplimentar unas diligencias por un caso distinto al del productor y ventrílocuo, el presunto agresor de Moreno quedó en libertad. La policía ha cursado ya una orden de busca y captura del fugitivo.

Durante la madrugada distintas fuentes ofrecieron versiones contradictorias sobre la liberación de Bushi. Una de ellas apuntaba a un error en la identificación del preso. Otros medios apuntaban a que el juez de Alcobendas que le había llamado para declarar ignoraba que el albanés tuviera otros asuntos pendientes. "Esto es fácil que se produzca cuando se trata de miembros de bandas organizadas, ya que no se hace cargo un solo juez de todos los asuntos que se le imputan", comentó un mando del Cuerpo Nacional de Policía.

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El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) niega este sábado que la errónea puesta en libertad de Bushi haya sido debida a un error judicial. El tribunal atribuye el fallo, aunque no lo hace de forma explícita, a los policías nacionales encargados de su custodia en los juzgados de Alcobendas (Madrid). Tanto el Tribunal Superior como el Ministerio del Interior han abierto sendas investigaciones para aclarar el escándalo.

El peligroso delincuente prestó declaración, esposado, por su presunta participación en el robo en un chalé de La Moraleja (Madrid). Según el TSJM, "al término de la declaración, el juez decidió su puesta en libertad por estos hechos" y "Bushi salió de la sala esposado y escoltado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía, que lo condujeron a los calabozos para su inmediato reingreso en el centro penitenciario". Eso es lo que pensaba el juez. Pero éste se enteró el viernes de que estaba en la calle. Todavía está por aclarar quién y cómo le liberó de los grilletes y le dejó marchar.

Bushi, de 39 años, está considerado por la policía como un individuo "muy peligroso". El 20 de diciembre de 2007 robó y estuvo a punto de matar a José Luis Moreno durante el asalto a su casa. El albanés decidió dar el golpe en el chalé de Moreno unas semanas después de abandonar la cárcel, donde permaneció un año sin que Albania enviase la documentación necesaria para que fuera expulsado de España. Los papeles nunca llegaron a pesar de que tiene antecedentes por uso de armas y explosivos y era buscado en su país por dos asesinatos.

Fue detenido junto a siete miembros de su banda, de la que era el presunto cabecilla, en la madrugada del 14 de noviembre de 2008. Habían cometido 30 robos desde septiembre de 2007, la mayoría de ellos en Madrid, aunque también en Toledo y Valencia, según fuentes policiales.

Se desplazaban hasta el lugar de los robos en coches alquilados, sustraían los coches de lujo que hubiese en las viviendas y, si era necesario, cubrían su huida mostrando algún arma de fuego para intimidar a sus víctimas. Bushi y el resto de miembros de la banda, que tenían pasaportes italianos y griegos falsificados, se dedicaban al tráfico de drogas y al robo de chalés. Utilizaban dos sistemas para entrar. El más habitual era colarse en el interior de la vivienda de manera silenciosa, aun cuando los dueños estuvieran dentro. La otra era irrumpir con gran violencia y atemorizar a los propietarios de la casa para que les dieran los objetos de valor y les abrieran la caja fuerte.

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