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El juez declara improcedente el despido del sastre de Camps

La juez de los social le impone una multa de 230.000 euros.- José Tomás se muestra satisfecho porque "la mentira tiene las patitas cortas"

El Juzgado de lo Social de Madrid ha condenado al propietario de la tienda Forever Young a indemnizar con 230.500 euros por despido improcedente del sastre José Tomás. El despido se produjo después de que el sastre hablara con el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, cuando fue requerido por éste para que declarara en relación con los trajes que la trama supuestamente regalaba a dirigentes del PP, como el presidente valenciano, Francisco Camps.

Tras conocer el fallo, Tomás se ha mostrado muy satisfecho y ha asegurado que "la mentira tiene las patitas cortas". Además, en su opinión, la sentencia es "contundente y machacadora", "hace justicia" y demuestra que "siempre" ha dicho la verdad en relación con el caso Gürtel

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En este contexto, se ha mostrado "convencido" de que Camps y los otros tres imputados en la parte de la causa que se instruye ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) "tendrán que admitir que recibieron regalos" de la supuesta trama de corrupción liderada por el empresario Francisco Correa. .

José Tomás ya declaró en marzo a EL PAÍS que le echaron de Forever Young (FY) al día siguiente de prestase declaración ante el juez Garzón. La empresa le envió una carta en la que mencionaba sin tapujos su comparecencia ante el magistrado de la Audiencia y ante la Fiscalía Anticorrupción.

Las regalías a políticos procedentes de FY se anotaban mediante facturas falsas, que, según el fallo, no eran obra de Tomás. Según la carta de despido, el sastre era el encargado de redactarlas. Sin embargo, la sentencia dice: ""No les consta a ninguno de los testigos [empleados] que el actor diera órdenes respecto al contenido de las facturas, ni las realizara físicamente". Él sólo hacía las funciones de un sastre.

Además, el juez indica que si alguien estaba al corriente de los regalos era, sobre todo, la propia empresa. Además, sobre los supuestos fallos que Forever Young utilizó para justificar el despido de Tomás, el veredicto sostiene que no cabe imputar al sastre "ninguna responsabilidad" al respecto.

"No nos hallamos ante faltas ocultas y continuadas, dada la posibilidad real de su conocimiento por parte del empleador", recoge la sentencia.

Así, el juez obliga a la empresa a indemnizar al sastre con la cantidad arriba citada o, si no, a readmitirlo de nuevo en el local donde trabajaba José Tomás, situado en la lujosa calle Serrano.

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