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La policía alerta del peligro de que miembros de los Latin Kings se conviertan en sicarios

La banda, mermada por las detenciones, mantiene activos a 100 de sus miembros en Madrid

La policía ha descabezado en los últimos años a una parte de la cúpula de los Latin Kings en España, si bien esta "organización criminal" mantiene aún "activos y operativos" en Madrid "a unos 100" de los 400 miembros que ha llegado a tener desde que se creó en 2000. Así se indica en un informe elaborado por los servicios de información del Cuerpo Nacional de Policía sobre las bandas latinas. El documento califica a los Latin Kings de "banda muy peligrosa de matones". La mitad de sus miembros son menores y podrían ser utilizados por la delincuencia organizada como sicarios, advierte la policía.

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Según el informe, que consta de 60 folios, el principal cabecilla de la banda es el ecuatoriano Eric Javier Velastegui Jara, el Padrino de los Latin Kings en España que en la actualidad se halla encarcelado. Otros miembros destacados son Pablo Antonio Sánchez Ferrer y Javier Efraín Brito Chica, ambos también en prisión por alentar o participar en riñas con otras bandas rivales, especialmente los Ñetas. El resultado de estas batallas callejeras se ha saldado, sólo en Madrid, con dos muertes y varios apuñalados que han logrado salvar la vida milagrosamente.

Pese a su peligrosidad (aún mantiene a unos 100 miembros operativos), la policía cree que los Latin Kings atraviesan por uno de sus peores momentos (se hallan en una fase de "sombra y oscuridad" fruto de las detenciones y el cerco policial). Su fuerza ha quedado mermada a raíz de la detención de 41 de sus miembros en dos operaciones desarrolladas el 15 de septiembre y el 5 de noviembre del año pasado.

En el informe, la policía avisa: "Hasta el momento, las acciones de esta banda se han centrado en agresiones a miembros de bandas rivales, con dos muertes, y a robos con violencia, pero no se descarta que en un futuro puedan ampliar su actividad al control de tráfico de drogas, la prostitución, la extorsión y el atraco".

Banda matriz

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Los Latin Kings se asientan sobre todo en Madrid y Barcelona, aunque disponen de ramificaciones en Murcia, Alicante y Torrevieja, entre otras ciudades. Almighty Latin King and Queens Nation (Todopoderosa Nación de Reyes y Reinas Latinos) es la denominación amplia de esta organización criminal, "matriz del resto de bandas que aparecen en la escena urbana de las grandes ciudades españolas".

Esos otros grupos son los Ñetas (enemigos jurados de los Latin Kings y con cuyos miembros mantienen una gran rivalidad con peleas mortales), los Latinos de Fuego, los Dominican Don't Play y los Dark Latin Globbers. Estas bandas "disponen de una estructura y organización similar a la de los Latin Kings, aunque menos desarrollada", señala el documento. La policía detuvo en 2005 a 50 Ñetas, 46 Latin Kings, cinco Dominican Don't Play, cinco Latinos de Fuego y un miembro de los Dark Latin Globbers. Ecuador (65,5%), República Dominicana y Colombia son los países de procedencia de los detenidos, de los cuales, el 46% son menores de edad.

La policía tomó conciencia de la implantación de los Latin Kings en España tras la detención de Velastegui (Guayaquil, 30 años) el 14 de mayo de 2003 por violaciones y robos con violencia. Durante un registro en su domicilio, los agentes hallaron "numerosa documentación con el anagrama Latin Kings, tampones del mismo y fichas con nombres de afiliados" de la banda.

Velastegui llegó a España el 30 de julio de 1999 para reunirse con su madre. La policía cree que huía de rivalidades internas de la propia banda y de la presión policial en su país. El "rey de reyes", de la organización, conocido como King Most, lo bendijo y coronó como Rey Latino. King Most fundó la banda en el barrio del Bronx (Nueva York, EE UU) y fue deportado a Guayaquil (Ecuador) en 1994.

Tras unos meses en España, Velastegui regresó a su país donde se reunió con King Jean, jefe de los Latin Kings en Ecuador. Velastegui pidió permiso a Jean -y lo obtuvo- para fundar los Latin Kings en España, pero bajo la estructura de la banda en Ecuador. Ya de vuelta en España, el líder nombró a sus colaboradores -los llamados Reyes Nobles- y empezó a montar la organización.

La máxima de la banda, que ofrece "protección" a sus miembros, es que "se entra pero no se sale". Sus miembros juran "férrea disciplina" y "obediencia ciega" a los líderes y tienen la misión de captar adeptos. Se convence a jóvenes inmigrantes latinoamericanos de la necesidad de afiliarse para defenderse de los miembros de bandas enemigas.

Del capítulo a la tribu

Al principio se les prohíbe fumar, faltar a clase o drogarse, pero los captados pronto participan en peleas con organizaciones rivales. "Se les somete a constantes amenazas y trato vejatorio", así como a "fuertes palizas" y "ejercicios extenuantes" si incumplen las normas internas o no respetan a los jefes. De esos castigos sólo se puede salir escalando puestos en la jerarquía, pasando "de castigado a castigador y de víctima a verdugo".

La estructura de la banda está formada por los capítulos (grupos de unos 20 miembros en cada barrio) y el reino (conjunto de capítulos). Los cuatro reinos españoles se llaman Inca (Madrid), Hispano (Barcelona), Maya (que engloba a Valencia, Alicante y Torrevieja), y Azteca (Murcia). Por encima del reino se encuentra la tribu.

La tribu de los Latin Kings en España se llama Sagrada Tribu America Spain (STAS). En el mundo hay otras tres: la del León (Chicago, EEUU), la del Sol (Nueva York) y la de Atahualpa (Ecuador). La nación es el conjunto de reinos y tribus. Todos los miembros de la banda, salvo los jefes, tienen que abonar una cuota semanal a la organización que oscila entre los tres y los ocho euros.

Pintada de los Latin Kings en la que se puede observar su principal símbolo, la corona.
Pintada de los Latin Kings en la que se puede observar su principal símbolo, la corona.JORDI ROVIRALTA

Acatar la 'biblia' para medrar

El informe interno de la policía revela que Latin Kings es "una de las organizaciones con mayor implantación internacional en países como EE UU y Ecuador, con miles de individuos integrados". Creada inicialmente "como una hermandad de apoyo a los latinos para su autoprotección frente a agresiones de otras bandas, ha derivado con el paso del tiempo en una organización criminal, como un grupo clandestino, poderoso y altamente jerarquizado y de estructura de mando piramidal".

Surgen los Latin Kings al hilo de la profusa inmigración llegada en los últimos años a España. Se unen "para sentirse como en casa" y "para reafirmar su personalidad y reconocimiento al margen del éxito académico o laboral". Los Latin Kings tienen sus propias leyes, su constitución o biblia, las mismas por las que se regía la banda en Nueva York. Para escalar posiciones dentro de la banda hay que conocer la biblia perfectamente y acatarla.

Son normas que rezuman "un sentimiento claramente racista, machista y xenófobo hacia todo lo que no sea latino", con constantes alusiones "a la falta de respeto de la sociedad" hacia ellos y que "predispone a los miembros hacia una indisciplina hacia las normas sociales y a un respeto total a la Biblia".

La banda tiene sus propias celebraciones: el 6 de enero, día de los Reyes; 14 de enero, fundación de la banda en España; y el 4 de mayo, día del Padrino. En la organización, los escritos de los jefes a sus subordinados se hacen mediante un código secreto. El código es muy simple ya que se limitan a sustituir las sucesivas letras del abecedario por números. El uno se corresponde con la primera letra del alfabeto y el 30 con la última.

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