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El debate sobre el estado de la nación

El presidente promete 420.000 portátiles para 5º de primaria

Zapatero evita responder a IU dobre la ampliación del paro

Pablo Ximénez de Sandoval

En un debate que el presidente del Gobierno planteó como el del cambio de modelo productivo para España, la educación fue presentada como uno de los pilares que, junto a la inversión en innovación y energías renovables, deben cimentar que ese cambio sea efectivo a largo plazo. José Luis Rodríguez Zapatero prometió ayer ante el Congreso que todos los alumnos de la educación obligatoria en España, en colegios públicos y concertados, a partir de 5º de Primaria tendrán un ordenador personal para hacer los deberes. Son 420.000 ordenadores portátiles que deben estar disponibles ya en el próximo septiembre. La medida se ampliará a los cursos superiores hasta el final de la educación obligatoria.

Los portavoces de ERC e ICV llaman a la medida "cheque-ordenador"
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Fue la más espectacular de las propuestas en educación de Zapatero. En pocas horas cosechó reacciones de asociaciones de profesores, padres y profesionales de las telecomunicaciones, que dejaron caer dudas de que sea posible tener disponible ese material después del verano, así como acerca de la formación necesaria del profesorado que implica esta modernización. Además, el presidente se comprometió a poner Internet inalámbrico en todas las aulas de España.

La otra novedad fueron las subvenciones para que los titulados universitarios parados entre 25 y 40 años puedan realizar masters para continuar su formación y reciclarse durante la crisis.

El líder del PP, Mariano Rajoy, le reprochó a Zapatero que ya en 2004, en su debate de investidura, prometió que habría un ordenador por cada dos alumnos en las aulas españolas. "Esperemos que ahora lo cumpla". Zapatero respondió que la nueva propuesta era distinta, pero eludió el incumplimiento de la anterior. Rajoy aceptó sin ambages el debate sobre la educación, pero para utilizarlo contra el Gobierno. "El reto, señor Rodríguez Zapatero, es la calidad de la educación", dijo. "Cualquier intento serio para cambiar el modelo económico o crear empleo productivo, pasa por la reforma en la educación", coincidió Rajoy con el presidente. Citó entonces estas palabras de Obama: "Aquellos países que produzcan la mano de obra mejor educada gozarán de ventaja en una economía cada vez más competitiva". Pero Obama "habla de una educación exigente y no de este coladero", atacó Rajoy.

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La reforma es "urgente" porque sus frutos son a largo plazo. Ahí terminó el debate. No hubo pacto, ni propuesta de pacto. La aportación más llamativa de Rajoy al debate sobre la educación fue afirmar que los socialistas no leen. Por su parte, los portavoces de ERC e ICV ridiculizaron la medida al calificarla de "cheque-ordenador".

"La crisis empieza a derivar en crisis social gravísima", dijo Rajoy, que no hizo propuestas concretas en este ámbito y fue fiel al discurso del PP por el que el empleo es la única y mejor política social. El portavoz de Convergència i Unió, Josep Antoni Duran Lleida, proclamó la misma idea en pocas palabras: "Lo más importante en las políticas sociales es la creación de empleo. Un país que limite su política social a la ampliación de los subsidios no tiene futuro".

Sin duda con esta observación se refería a la intención del Gobierno de ampliar de alguna manera las ayudas por desempleo a aquellos parados que pierdan el subsidio, una situación en la que dentro de poco estarán más de un millón de personas. Sin embargo, Zapatero no hizo mención alguna a estos planes, a la espera de negociarlos primero con los sindicatos en el marco del diálogo social.

Esa ausencia se la echó en cara el diputado de IU, Gaspar Llamazares, quien bajo el lema de "primero, la gente", acusó a Zapatero de no dar respuesta a la "emergencia" que supone que un millón de parados no reciban ningún subsidio. "Usted tenía que haber respondido aquí con una ampliación de las ayudas", le dijo Llamazares. Zapatero evitó concretar cualquier avance en este asunto, ni siquiera cuando Llamazares le preguntó directamente: "¿Piensa ampliar la prestación?". No respondió.

De izquierda a derecha, las ministras Elena Espinosa, Ángeles González-Sinde, Trinidad Jiménez, Beatriz Corredor, Cristina Garmendia y Bibiana Aído.
De izquierda a derecha, las ministras Elena Espinosa, Ángeles González-Sinde, Trinidad Jiménez, Beatriz Corredor, Cristina Garmendia y Bibiana Aído.ÁLVARO GARCÍA

PROPUESTAS EN POLÍTICAS SOCIALES

- Ordenador para todos los alumnos y pizarras digitales. El Gobierno afirmó que dará 420.000 ordenadores portátiles, uno por cada alumno de 5º de Primaria, para que trabajen con ellos desde el próximo curso. Se ampliará después a todos los cursos superiores. También anunció la instalación de pizarras digitales en las aulas y conexión inalámbrica

a Internet.

- Posgrado gratis para universitarios parados.

El Ejecutivo prometió 70 millones de euros para que las universidades matriculen gratis en estudios de posgrado a titulados en paro.

- Cheque-transporte. Funcionará en las empresas como el cheque-restaurante. Será un bono para transporte público que no tributará. Según el Gobierno, supone un ahorro del 24% en el uso del transporte público.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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